Presidente Mas: "Afronto este momento único con compromiso total, voluntad de hierro y una gran fe en Cataluña"
Durante el acto de toma de posesión, ha pedido en el Estado que “no ponga rejas a aquello que es la expresión de la libertad y de la voluntad de un pueblo”


Barcelona.-El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha manifestado hoy, durante el acto solemne de toma de posesión como cabeza del Ejecutivo por segunda legislatura consecutiva, que “afronto este momento único con un compromiso total para vencer todas las dificultades que nos encontramos, con una voluntad de hierro para superar los obstáculos y, además, con una gran fe en Cataluña, una fe que nada ni nadie nos puede sustraer.

Durante su discurso de toma de posesión, el presidente ha subrayado la importancia  de que el país actúe en estos momentos “lo más unido posible” porque la situación actual “supera de muy largo cualquier liderazgo, coalición de Gobierno, pacto parlamentario y dinámica de partidos”.

Artur Mas ha remarcado que esta unidad de Cataluña se tiene que mostrar en los aspectos fundamentales y ha destacado cuatro: el carácter esencial de la democracia, la cohesión social, la recuperación económica y que Cataluña pueda decidir su futuro.


Un pacto firme en los objetivos y sereno en las formas

El presidente Mas ha querido subrayar que “este Gobierno y esta legislatura nacen con una gran legitimidad, con la legitimidad de un pacto hecho en el Parlamento, fruto de unas elecciones y, por lo tanto, con la legitimidad del voto muy mayoritario de la gente de este país, pero con la legitimidad añadida de que los programas eran muy claros”.

Un pacto que, según ha dicho el líder del Ejecutivo es “casi nuevo en la política”. Por eso, ha pedido que “se juzgue en función de los resultados que se vayan produciendo y no en función de determinados prejuicios que están instalados”. Pero también ha advertido que “estos resultados también se tienen que juzgar, si queremos tener un carácter mínimamente positivo, en función del terreno de juego que tenemos delante”.

“Es un pacto que nace firme en los objetivos, muy firme, y sereno en las formas”, ha resaltado el presidente, y ha abogado para “no perder de vista los objetivos de país, pero actuar con la serenidad y el espíritu pacífico y de diálogo que se nos atribuye al pueblo de Cataluña y que creo que forma parte de nuestra identidad colectiva”. En este sentido, el presidente ha ofrecido “mano abierta y mano extendida” para ensanchar “los acuerdos que en este momento tenemos establecidos en la política catalana para que sean más participativos del que han sido hasta ahora”.


No poner rejas a la expresión de la libertad de un pueblo

Respecto a las relaciones Cataluña-Estado, el presidente ha remarcado que “fuera bueno que el Estado español intentara no poner puertas al campo de esta voluntad del pueblo de Cataluña de decidir su futuro y que no pusiera rejas a aquello que es la expresión de la libertad y de la voluntad de un pueblo”.

En esta misma línea del derecho a decidir, la cabeza del Gobierno ha señalado que “cambiar el rumbo de la historia de un país es como cambiar el rumbo de un gran transatlántico” y ha dicho que esta maniobra “no se puede hacer de golpe, es una maniobra que se tiene que hacer muy cuidadosamente”. “Por eso – ha añadido – he hablado muchas veces de transición nacional, porque no es un golpe de timón, este cambio de rumbo se tiene que hacer en forma de transición”.

El presidente de la Generalitat, dirigiéndose a los que temen que esta nueva etapa lleve a “un rumbo de colisión”, ha advertido que “si no se hace nada y no hubiera esta voluntad de cambio de rumbo de la política catalana, nuestro rumbo como país sería un rumbo a la deriva y cuando vas a la deriva lo más probable es que acabes contra las rocas”.


Recaudar tributos

En otro momento de su intervención, el presidente Mas ha aprovechado la presencia en el acto del ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, para recordarle que desde el Palau de la Generalitat “se controlaba y compensaba la autoridad real y se administraban impuestos” y ha añadido que la Generalitat “nació como una institución que tenía como finalidad primera recaudar tributos”.

El presidente ha dedicado también buena parte de su discurso a la situación económica y ha subrayado la importancia de “que haya un cambio de tendencia” porque “es fundamental tocar fondo y volver a crecer”.

Al acto de toma de posesión, han asistido todos los miembros del Gobierno en funciones, la esposa del presidente, Helena Rakosnik, y otros familiares, así como una amplia representación política, institucional y de la sociedad civil.

FOTO: El president pasa revista a los Fuerzas de Seguridad de Catalunya