El Biesca Gijón cae ante un Voltregà que tuvo que remontar

El Biesca Gijón cae ante un Voltregà que tuvo que remontar

La gijonesa Natasha Lee desniveló el marcador en favor del cuadro catalán

 

El Biesca Gijón cayó en su visita al Voltregá (4-2), aunque estuvo a punto de traerse algo positivo porque los dos últimos tantos, anotados por Natasha Lee, llegaron cuando sólo restaban dos minutos.

 

Las gijonesas salieron muy centradas en este encuentro, con una defensa en zona en la primera mitad, que se les atragantó a las catalanas, tapando muy bien todos los huecos y aprovechando las contras con las que llegaron a adelantarse en el marcador con tantos de Silvia Cadrecha y María Díez.

 

Con este resultado el Biesca aguantaba bien las acometidas del Voltregà, renunciando a algún contragolpe de tres para no ser pillado en un robo de bola y coger la defensa desguarnecida. Con el resultado de 2-0 se llegó al final de los primeros veinte minutos.

 

El segundo periodo comenzó con un panorama similar al del primero, aunque minutos después del arranque las asturianas pasaron a defensa individual, pese a todo las anfitrionas recortaron distancias con un gol de Anna Casarramona.

 

El desgaste físico hizo que las gijonesas cometieran algún error en defensa y el técnico ordenase pasar nuevamente a una zona, pero aún así llegaría el gol del empate.

 

Con igualdad en el marcador se entraría en los últimos dos minutos del partido y sería la gijonesa Natasha Lee la que desnivelaría el marcador. En ese momento ambos equipos tenían nueve faltas en su casillero y que cayera la décima de uno u otro lado dependía la suerte del partido.

 

Con desventaja en su casillero el Biesca tuvo que arriesgar ya que de nada le valía una derrota por la mínima, y finalmente acabaría cometiendo la décima falta que se encargaría de transformar Natasha Lee a falta de treinta segundos para el final, sin tiempo para más.

 

Hoy, nuevo compromiso para las biesquistas, será ante el Sferic de Terrassa en el último partido oficial antes del parón navideño.

 

FOTO: Albert Bover

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