Gijón.- La Corporación gijonesa celebró el Pleno extraordinario de Honores y Distinciones, en el que se ha concedido la Medalla de Oro de la ciudad a la Banda de Música de Gijón, así como cinco medallas de plata, que han recaído en José Gonzalo Fernández Mieres, la Asociación de Veteranos del Real Sporting, el Club Deportivo Gijón Balonmano, el Comité Ciudadano Anti-Sida del Principado de Asturias e Isaac del Rivero de la Llana. La portavoz del Grupo Popular, Pilar Fernández Pardo, se encargó de glosar la figura de Gonzalo Mieres.
Intervención de Pilar Fernández Pardo, portavoz del Grupo Popular: “De acuerdo con el Reglamento de Organización, Funcionamiento y Régimen Jurídico del Ayuntamiento de Gijón, que establece en su artículo 66 la capacidad municipal de acordar la concesión de honores a las personas o entidades que se hayan destacado por sus especiales merecimientos, hayan originado señalados beneficios o prestado servicios extraordinarios al municipio de Gijón, el Ayuntamiento decidió iniciar, con el consenso de todos los grupos políticos municipales, el procedimiento para otorgar la Medalla de Plata de la Villa a don José Gonzalo Fernández Mieres.
José Gonzalo Fernández Mieres, nació en Mieres del Camino en el año 1943. Dos años después se trasladaría con sus padres a Gijón, donde fijó su residencia y donde se ha convertido en uno de los principales ‘embajadores’ de la música coral y el folclore asturiano. Sus trabajos periodísticos y sus apoyos solidarios también merecen público reconocimiento, pero es, sin duda, su trayectoria personal la que mejor le distingue.
Glosar la figura de Gonzalo Mieres es hablar de generosidad en mayúsculas, de bondad, de integridad, de honradez, de sensibilidad y capacidad de sacrificio. Tiene el don de volcarse en hacer protagonistas a los demás, apoyando a multitud de asociaciones, colectivos y personas de nuestra ciudad, dándoles visibilidad, y manteniéndose él siempre en un segundo plano.
Hoy toca hacer una excepción, ya que Gonzalo Mieres es uno de los protagonistas de este Pleno de Honores y Distinciones. Y me corresponde el inmenso orgullo de hacerlo, recordando algunos datos de su biografía.
Marido ejemplar y padre dedicado, junto con su esposa María del Pilar Teresa García ha formado una familia de cinco hijos y ocho nietos.
Su actividad empresarial comienza en 1960 en Cros, S. A. Trece años después se incorpora a Esnova, compañía de la que fue director y consejero delegado y de cuya mano recogió en Detroit (Estados Unidos) el premio Q. S. P. (Calidad, Servicio, Premio) de la General Motors como mejor fabricante y diseñador de contenedores especiales para el transporte y el almacenaje. Desde 2001 fue también consejero de Ideas en Metal.
En 2008 se jubiló de la actividad profesional, en la que destacó como empresario innovador y diseñador reconocido, y aprovechó para intensificar sus colaboraciones periodísticas en los programas Bravo Asturianísimo, Luces de la Ciudad y Aulas de Cultura.
Fue en 1964 cuando ya inició sus colaboraciones en diversos periódicos asturianos. Ha tenido siempre una especial preocupación por los problemas sociales y se ha caracterizado como dinamizador de los colectivos que pasaban inadvertidos en la ciudad, resaltando en sus crónicas los perfiles más humanos y propiciando la participación ciudadana. Su firma se convirtió en habitual en el acontecer de los barrios de El Llanos, Roces, Pumarín, Contrueces y La Calzada.
Gonzalo Mieres pone pasión en todo aquello que hace, y una de sus pasiones es el teatro. En el año l962 se incorpora a Gesto grupo de teatro de cámara y ensayo, realizando una intensa labor como actor y miembro del equipo. Junto a otros compañeros, se hace cargo del Grupo de teatro T.E.U. y fue el director en 1968 de la obra ‘Fedra’, de Unamuno. En el año 1972 pone en marcha y preside en el Centro Asturiano de La Habana de Gijón, el grupo de teatro de vanguardia Talía.
Mantiene una estrecha vinculación con la Agrupación Artística Gijonesa a partir de setiembre de 1977, y esta entidad le galardonó en el año 1995 con el IV Premio Gigía, por su apoyo periodístico alentando a la sociedad y a sus artistas. En ese mismo año, en diciembre de 1995, la Asociación Folclórica Los Collacíos le entrega el VI Premio’ Maíces de Oro’.
A estos galardones le siguen otros muchos. En el año 1994 recibe el Premio especial de ‘Proyecto Hombre’ por sus informaciones periodísticas sobre la problemática de la droga y su contribución al programa de rehabilitación de toxicómanos. En ese mismo año recibe también la Insignia de Oro del Orfeón Gijonés ‘Enrique Montes’ y el Premio ‘Estrella de Oro’ de la Asociación de Vecinos ‘San Julián’, de Roces.
En Octubre de 1994 es distinguido con la Insignia de Oro y el homenaje popular y multitudinario organizado por la Agrupación musical de pulso y púa ‘Sonatina Gijonesa- Fidelio Trabanco’, con la adhesión de infinidad de sociedades y representaciones populares y empresariales. Diez años más tarde se le reconoce su trayectoria periodística y apoyos solidarios con los premios Insignia de Oro de Agisdem y Premio Asturíanista Obaya-Cardín.
Otra de las pasiones de Gonzalo Mieres es la música. Lleva años colaborando activamente en la promoción de la música coral y el folclore asturiano. Un ejemplo de ello es el Concurso de la Canción Asturiana.
En abril del año 2008 su hija Melisa activó en Youtube el canal Melimieres.Bravo Asturianísimo, que se mantiene con un gran nivel de audiencia.
Sus múltiples inquietudes le convierten en valedor de muchas de sus actividades, como el ajedrez, con la creación de la sala José Raúl Capablanca. Fue el responsable de la sección y del equipo de ajedrez que lograba, en numerosas ocasiones, el Campeonato de Asturias y terceros de España por equipos, destacando el entonces primer tablero, el cubano José Carlos Menéndez.
Es también un gran aficionado al billar, juego que le vinculó definitivamente con el Centro Asturiano de La Habana de Gijón. En esa sociedad funda en 1978 el grupo folclórico que apadrinó Pilar Cantarino, y ocupó diversos cargos directivos durante veinte años, desde 1970 hasta 1990. Fue uno de los directivos que hicieron posible la compra de la finca ‘La Torre’ de Mareo y su posterior ampliación.
Comprometido también con la educación, en el año 1975 fue uno de los fundadores de la Asociación de Padres de Alumnos del Colegio Público ‘Rey Pelayo’, siendo después miembro de su junta directiva y ocupando los cargos de vicepresidente y presidente.
En el año 1986 se incorpora a la junta directiva de la Asociación de Padres de Alumnos del Centro de Enseñanzas Integradas, antigua Universidad Laboral y es elegido por los padres y madres de alumnos para representarles en el Consejo Escolar. Esta Asociación le distingue con el título de Socio de Honor al cesar sus actividades, cuando terminó los estudios una de sus hijas.
Fue miembro de la Asociación de Padres y Madres de Alumnos (APA) y del Consejo Escolar en el Instituto de bachillerato ‘Doña Jimena’, colaborando con este centro hasta que terminaron sus estudios tres de sus hijas.
Ha realizado actividades en la Parroquia de La Inmaculada, formando parte del Consejo Parroquial y organizando actos en los salones del Colegio de los jesuitas y en el teatro del Patronato San José. Colaboró en julio de 1986 en la puesta en marcha del Centro Inmaculada para personas mayores, en los bajos de la calle Niño Jesús de Ceares.
Su afición al deporte le llevan, en el año 1982, a la Presidencia de la Federación Asturiana de Natación a propuesta del Club Natación Santa Olaya. Ese mismo año es nombrado vicepresidente de la Agrupación de Federaciones Deportivas del Principado de Asturias.
Acostumbrado a ser el eco de tantos colectivos vecinales, fue también vicepresidente de la Asociación de Vecinos de Castiello de Bernueces en 1994.
Como el propio Gonzalo Mieres ha dicho públicamente en alguna ocasión: “La vida de una persona nunca es en solitario. Es su vida y la de aquellos a los que ha apoyado”. Y son multitud las personas y colectivos a los que él ha apoyado desde diversas plataformas, dándoles la palabra o la voz. Aunque brilla con luz propia, hoy queremos que los focos le iluminen a él y otorgar un homenaje a quien se ha dedicado a hacerlo a los demás. Queremos pedirle, además, que continúe con sus proyectos, con su extraordinaria labor de hacer feliz a tanta gente. Él mismo dice que “no se envejece cuando hay ilusiones y proyectos” y a Gonzalo Mieres le sobran ambas cosas.
En reconocimiento de todo ello, de acuerdo con lo dispuesto en los artículos 75 y siguientes del Reglamento de Organización, Funcionamiento y Régimen Jurídico del Ayuntamiento de Gijón, propongo que se otorgue la Medalla de la Villa, en su categoría de Plata, a don José Gonzalo Fernández Mieres.