El IMSERSO ha convocado un mínimo de 206.000 plazas para pensionistas que quieran participar en los diferentes programas de termalismo social que ha concertado con balnearios y establecimientos de toda España. La financiación de las mismas corre a cargo del Instituto y estas abarcarán casi todo el año que viene, desde febrero a diciembre. Andalucía y Cataluña son las Comunidades Autónomas que previsiblemente reciban más asistencia, ya que ofrecen más de 32.000 plazas cada una.
El Boletín Oficial del Estado ha publicado ya la convocatoria y ha puesto al acceso de los interesados los formularios de inscripción para conseguir estas plazas, que incluyen el tratamiento termal, el reconocimiento médico inicial (al entrar en el balneario), el seguimiento médico posterior, el transporte hasta el balneario desde el centro hotelero, si es que hubiera distancia entre ambos, la póliza turística, y obviamente, el alojamiento en régimen de pensión completa.
El IMSERSO contribuirá a la financiación de dichas plazas con un aportación media de 157,31 euros, pues su importe oscila entre los 114 euros y los 212, siempre en función del tipo de turno y del mes de desarrollo de las actividades. El Instituto hará la aportación directamente al establecimiento termal.
Cada una de estas plazas está pensada para los pensionistas del sistema de Seguridad Social por conceptos de jubilación o de invalidez, y sea cual sea su edad. El programa se extiende también a los beneficiarios de pensiones de viudedad, o de otra clase, que hayan cumplido 60 años y a los españoles residentes en el exterior que reciban pensión y tengan también 60 años. En todos los casos, el beneficiario deberá precisar tratamientos termales por prescripción médica y tendrá que haber alcanzado la baremación que le permita optar a una de las plazas convocadas. Una baremación que efectúan las Comunidades Autónomas que tengan transferidas estas competencias propias del IMSERSO, o bien el Instituto.Los criterios de puntuación se atendrán a dos criterios fundamentales, y por este orden de prioridad: la necesidad de recibir tratamiento termal de acuerdo con el estado de salud y la situación económica de la persona solicitante, en concreto el nivel de ingresos al mes. Si la solicitud la formaliza un matrimonio, se estudiará el volumen de ingresos mensual del propio matrimonio. En cualquier caso, la preferencia la tendrán las rentas bajas.
Los cónyuges de las personas que obtengan la plaza también podrán disfrutar de las mismas, si bien han de reunir las mismas características, y en consecuencia, requerir tratamiento termal si así lo establece su médico.
Los plazos de adjudicación son los siguientes, según recoge el Boletín Oficial del Estado (BOE): para los turnos de febrero a agosto de 2013, hasta el 16 de mayo; para los de septiembre a diciembre, hasta el 30 de octubre del año que viene. Una vez resueltas las solicitudes, lo que el IMSERSO comunicará en tres meses desde la presentación de la propuesta, las personas interesadas recibirán la notificación correspondiente.
Distribución de plazas por Comunidades Autónomas
Andalucía es la Comunidad Autónomas en la que más plazas se ofertan, en concreto 32.846. Las provincias de Sevilla, con 7.200, y Málaga, con 6.703, son las que dentro de esta región recibirán previsiblemente a más adjudicatarios de plazas de termalismo social.
En toda Cataluña habrá 32.403 plazas a disposición de los interesados, sobre todo en Barcelona, con casi 4.000. A continuación se encuentran la Comunidad de Madrid (25.206 plazas) y la Comunidad Valenciana (22.425), en donde la provincia de Valencia registra la mayor oferta, un total de 10.877 plazas a la espera de beneficiario. A los españoles residentes en el extranjero se las ha adjudicado 297, y a Ceuta y a Melilla, 226 y 185, respectivamente. Para más información, puede consultarse el BOE del pasado sábado.
Más de 100 balnearios repartidos por toda la geografía nacional participarán en los programas de termalismo, cuyas ventajas para la salud de los pensionistas que se acojan a una plaza han quedado demostradas; de hecho, durante los seis meses posteriores al tratamiento termal, el usuario consume menos fármacos para su aparato locomotor, exactamente un 39% menos de media.Por regla general, estos programas de termalismo social que el IMSERSO pone a disposición de los pensionistas interesados permiten la conservación de más de 18.000 empleos directos e inducidos.
