Oviedo.-Vecinos de los barrios ovetenses de Ventanielles, Guillén Lafuerza y La Monxina, junto con miembros del Grupo de Urbanismo del 15M, tomaron parte el domingo 16 de diciembre en un taller colaborativo de ideas para convertir la autopista “Y” en un bulevar urbano, "en una experiencia sin precedentes en nuestra ciudad". Al proceder "unilateral e intransigente del Ayuntamiento, demostrado por la imposición del cuarto ramal del enlace de El Rubín sin tener en cuenta la opinión y las denuncias de las personas afectadas", los vecinos contraponen un modelo participativo, “de abajo a arriba”, en el que los proyectos de transformación urbana nacen de las necesidades y aspiraciones de los propios habitantes, y "no se imponen desde un poder político supuestamente representativo".
De entre los problemas producidos por la autopista en la calidad de vida de las personas afectadas, las participantes destacaron la contaminación acústica y atmosférica producida por la intensidad del tráfico, el aislamiento de los barrios por los que atraviesa, la degradación de las zonas verdes adyacentes –convertidas frecuentemente en vertederos-, la infrautilización de un enorme espacio ocupado únicamente por vehículos, y la baja calidad estética de la entrada principal a la ciudad, atravesada por infraestructuras ajenas a la escala urbana.
El acceso de los peatones, la apertura de carriles-bici y la creación de nuevas zonas verdes públicas fueron las propuestas más repetidas como alternativas de utilización para los terrenos que actualmente monopoliza en exclusiva el tráfico rodado, que sería controlado mediante glorietas y pasos de peatones regulados por semáforos. De esa manera se conseguiría la permeabilidad entre los barrios adyacentes y se dignificaría estéticamente el paisaje urbano del acceso a Oviedo. Las participantes propusieron además la reserva de una superficie al inicio del bulevar para acoger un aparcamiento disuasorio para los vehículos de entrada conectado con el transporte público y un espacio abierto multiusos capaz de acoger ferias, celebraciones al aire libre o cualquier tipo de evento similar. El espacio actualmente ocupado por la mediana y los carriles y arcenes de la autopista se sustituiría por un bulevar central arbolado con dos carriles bici, cuatro carriles para el tráfico urbano (dos en cada sentido), más uno de entrada destinado exclusivamente al transporte público y a los vehículos de alta ocupación (Bus-VAO), y dos amplias aceras de cinco metros de ancho que conectarían peatonalmente los barrios del Este con el centro de la ciudad. Las zonas verdes adyacentes albergarían espacios mixtos de estancia y recreo para todas las edades, conectados mediante sendas urbanas aptas para la práctica deportiva. Los vecinos están seguros de que este proyecto dinamizaría positivamente el entorno y beneficiaría no sólo a los barrios de los alrededores, si no a toda la ciudad de Oviedo.
La próxima sesión de trabajo en la que se continuarán perfilando los detalles de la propuesta se celebrará, tras las fiestas navideñas, el próximo día 13 de enero. Como avance, se plantea una alternativa al proyecto municipal de sustitución de la actual pasarela que conecta Ventanielles con el Centro Comercial Los Prados y que tiene asignados 500.000 euros en el proyecto de presupuesto municipal: los vecinos proponen su eliminación y su sustitución por dos simples pasos de peatones controlados por semáforos, uno al final de la calle Río Dobra y otro frente al Centro de Salud. Como se aprecia en el croquis adjunto, el desnivel del aparcamiento del Centro Comercial se resolvería de manera natural mediante escaleras, y dotando de una acera al ramal descendente desde la Avenida de Atenas.