Lima, Perú.- Los recursos naturales como eje dinámico en la estrategia de integración y unidad de nuestros países, fue uno de los temas centrales de la primera jornada, durante los discursos de apertura de la reunión de Cancilleres, previa a la VI Cumbre de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno de la Unión de Naciones Suramericanas, UNASUR.

Tanto el Canciller Roncagliolo, como el Secretario General de UNASUR, durante sus discursos de bienvenida, pusieron mucho énfasis en el tema de una explotación soberana de los Recursos Naturales. 

El ministro anfitrión resaltó el gran potencial de recursos naturales del área, planteó la necesidad de ponerlos en valor, y destacó los planteamientos de Rodríguez en torno a la magnitud de las reservas hídricas, energéticas y minerales de la Amazonía suramericana.

Roncaglilo señaló que esos recursos no solo deben servir al desarrollo, sino también a la sostenibilidad del planeta y señaló que el peso de la región en el mundo está en dependencia del aprovechamiento de sus riquezas.

Rodríguez señaló que ese potencial es la fuerza centrípeta de la integración y apuntó que la región no constituye una potencia política, militar, económica ni tecnológica.

Añadió que no cabe absolutamente ninguna duda de que la más grande fortaleza de la región es el descomunal reservorio de recursos naturales que posee.

El canciller peruano señaló por otra parte que, en medio de la crisis económica internacional "esta es la hora de América del Sur", cuyos países están en mejores condiciones de afrontarla y avanzan en el fortalecimiento de su integración.

Planteó igualmente construir una ciudadanía suramericana para dar un paso decisivo de unión del "bloque emergente" y destacó en tal sentido las medidas de libre tránsito de personas alcanzadas y planteó la posibilidad de una visa común de ingreso a América del Sur.

Tras evocar los orígenes de la integración, dijo que la coyuntura de crisis "permite hablar, dos siglos después, de la hora de América del Sur, pues la crisis, esta vez, nos encuentra unidos y con una visión clara y determinada sobre nuestro camino y destino común".

Sostuvo que la región está "más cerca que nunca" de cumplir con la promesa de vida independiente, pidió no mitificar las diferencias entre algunos países miembros y destacó el carácter democrático y pacífico de Sudamérica.

Rodríguez señaló de otro lado que la firma de un tratado de integración y unión sudamericana es un paso de proporciones históricas que recoge dos siglos de intentos de unidad, desde el Congreso Anfictiónico de Panamá convocado por el Libertador Bolívar.

Añadió que tras diversos éxitos y fracasos, hoy hay condiciones mucho más favorables por los cambios que se operan en el mundo y en la región.

El canciller Roncagliolo hizo por otra parte un llamado a los países suramericanos a la "atenta y vigilante cooperación internacional" contra la actividad propagandística de grupos de exalzados que el gobierno califica como pro-terroristas.

Llamó a esas organizaciones "grupúsculos" afines al terrorismo que adoptan nuevas formas al amparo de las libertades y dijo que no tienen lugar en la zona de paz que conforman las democracias de los países suramericanos.