El movimiento del 15M ha convocado para la jornada del domingo 19 de junio manifestaciones en medio centenar de ciudades españolas, esperándose una concentrtación masiva en las nueve manifestaciones que convergerán osbre el centro de Madrid y a la que los simpatizantes de la protesta popular en Asturias se sumarán desde la manifestación centralizada en varias calles del centro de Gijón.
Los organizadores, democraciarealya entre ellos, hicieron durante toda la semana reiterados llamamientos al carácter pacífico de estas demostraciones de 'indignación' ciudadana ante los defectos y limitaciones del sistema democrático español, la deficiente representación de los electores, que sobrevalora a los partidos nacionalistas otorgando un desmesurado valor a los votos obtenidos por ellas y permitiendo así un permanente ventajismo en poder político, infraestructuras y servicios, en sus territorios a costa del resto del Estado, y la debilidad de los gobiernos ante los especuladores financieros, entre otras.
La actuación de grupúsculos antisistema durante estos días atrás, pese al escaso número de integrantes de los mismos --la acción de diez o doce manifestantes se ha elevado por determinados medios a categoría universal--, ha calado en parte de la opinión pública, con lo que en la jornada de este domingo se tratará especialmente de poner coto a la acción de los infiltrados radicales, aún cuando resulta materialmente imposible su control absoluto en el contexto de manifestaciones ciudadanas que no disponen de los contundentes servcios de orden que en su día tenían los partidos de izquierda o los sindicatos.
El sábado, alguno de los medios más radicales en sus tesis involucionistas, como la cadena Intereconomía, hacía llamamientos continuos a una contundente intervención hoy por parte de los antidisturbios --de su discurso cabe pensar que las cargas policiales habrían de producirse haya o no hechos violentos--, obviando el carácter legítimo, y legal, de estas manfiestaciones, ejercicio del derecho ciudadano a la expresión de su disconformidad.