El Centro es fruto de una iniciativa del Rey Abdullah, y tiene su origen en la Conferencia Mundial para el Diálogo celebrada en Madrid en julio de 2008.  Con la finalidad de erigirse como un punto de encuentro entre los seguidores de las diferentes religiones, culturas, y facilitar el diálogo y el entendimiento interreligioso e intercultural como herramienta para fomentar el respeto a la diversidad, la justicia y la paz, el 13 de octubre de  2011 los  titulares de Exteriores de España, Arabia Saudí y Austria firmaron en Viena el Acuerdo para el establecimiento del Centro, que hoy ha sido oficialmente inaugurado.

El ministro García-Margallo, en su discurso de inauguración, ha considerado que "la coexistencia pacífica de diferentes culturas y religiones es uno de los principales desafíos del proceso de globalización". Por esta razón, ha declarado, tanto el multilateralismo como la promoción del diálogo intercultural e interreligioso son dos prioridades transversales muy importantes de la política exterior española. En estas prioridades se enmarca, de manera concreta, nuestra firme defensa de la libertad de religión y de creencias y de las minorías religiosas. La oportunidad del Centro, ha reflexionado, es tanto más evidente en cuanto la actualidad internacional nos muestra cada día conflictos irresueltos con algún elemento religioso, como el de Siria o el de Mali.

El ministro ha agradecido además a Su Majestad el Rey Abdullah bin Abdulaziz su determinación en lanzar la iniciativa y a Austria su hospitalidad al acoger la sede del Centro. Por último ha animado a otros países de diferentes regiones, con culturas y religiones distintas, a que colaboren con el Centro, compartiendo sus principios y objetivos.

En este contexto, el Centro está preparando un ambicioso programa de actividades que incluye conferencias, talleres, seminarios y actividades asociativas, siempre con el objetivo en mente de favorecer la comprensión y la armonía entre los distintos cultos religiosos y sus seguidores.

En los márgenes de la inauguración, el ministro se ha reunido con sus homólogos austriaco y saudí. En la reunión con el príncipe Saud Al Faisal, ambos ministros han podido analizar la intensa agenda bilateral que comparten España y Arabia Saudí, y que en estos momentos tiene un fuerte contenido económico gracias  al creciente número de empresas españolas presentes en  ese  país, y cuyo ejemplo paradigmático es el proyecto estratégico del AVE Meca-Medina. Han abordado, además, la situación regional, marcada por la situación en Siria y la tregua alcanzada en la Franja de Gaza. También han valorado la solicitud de la Autoridad Nacional Palestina de ser reconocida como Estado observador en Naciones Unidas, que ha sido presentada hoy.

En su encuentro con el ministro Spindelegger, el ministro García-Margallo ha explicado a su homólogo las últimas reformas adoptadas por el Gobierno español. Asimismo, ambos han  abordado el contexto económico actual de la Unión Europea y de la zona euro y han intercambiado puntos de vista sobre el próximo presupuesto comunitario (Mecanismo Financiero Plurianual 2014-2020). La cuestión de la solicitud palestina también se ha suscitado en el encuentro, y, en particular, la búsqueda en el seno de la UE de un consenso.