La bolsa de Wall Street invita al español a la sesión del cierre mientras los pronósticos se abren con la posibilidad de lluvia
MIGUEL MARTÍNEZ
DALLAS (EEUU)
El pronóstico meteorológico confirma que las pisibilidades de lluvia para el domingo en Sao Paulo crecen. Son ya del 75% y eso puede convertir la última cita del mundial en una carrera loca, al menos en un gran premio mucho más abierto que sobre seco. Era algo con lo que en Ferrari y Red Bull contaban desde hace semanas, por eso ni unos ni otros, dieron nunca el campenato por decidido. “Sabemos que en Brasil puede llover y ya sabemos cómo ha rendido Ferrari y Alonso en esas circunsrtancias”, recordaba Mark Webber en el reciente GP de Austin. Así que las posibilidades de Alonso cotizan al alza, una situación que el asturiano escenificó en el cierre de la sesión de bolsa de Wall Strett.
Fue allí, en el centro financiero mundial, donde el asturiano aseguró que afronta este fin de semana la última carrera del Mundial de Fórmula Uno, el Gran Premio de Brasil, con "esperanza y optimismo", aunque reconoció que necesita una "carambola" con los resultados para ganar el campeonato. "Sabemos que lo tenemos difícil, pero la Fórmula Uno se caracteriza por estar fuera de lo previsible y vamos a intentar hacer una buena carrera y sacar el máximo número de puntos posible", afirmó el asturiano a Efe después de hacer sonar el tradicional campanazo que pone fin a las contrataciones en la bolsa de Nueva York.
Ahora ha conseguido trasladar toda la presión sobre Vettel, el único que puede perder un campeonato que solo la tenacidad de Fernando Alonso ha mentenido vivo. "Ya sacaremos cuentas al final, cuando salga la bandera de cuadros". "Siempre intentamos prepararnos al máximo y esta vez vamos a hacer lo mismo, cuidando todos los detalles para que no haya ningún problema y no cometer ningún error tonto", mantiene el asturiano.
Alonso cerró la sesión de la Bolsa de Nueva York con motivo del anuncio del Banco de Santander, uno de sus patrocinadores, de que donará 250.000 dólares a la Cruz Roja de EEUU para ayudar a los damnificados por el huracán "Sandy", que el pasado 29 de octubre causó graves daños en Nueva York y su región. Antes de ese acto, Alonso explicó en Nueva York, que "el esfuerzo de meses se concentrará en poquísimo tiempo".
Alonso participó en una mesa redonda organizada en la Academia de las Ciencias de Nueva York, en el número 7 del World Trade Center, durante el lanzamiento de la campaña promocional "Safeguarding Me", llevada a cabo por Kaspersky Lab, con el apoyo del doble campeón mundial asturiano.
"Quedan 71 vueltas, en las que se decidirá todo. El esfuerzo de meses se concentrará en poquísimo tiempo", dijo el piloto español, en declaraciones referentes la última carrera del Mundial, en Sao Paulo (Brasil), que reproduce la pagina de Facebook de Ferrari. "Luego lo que pase, pasará, y lo importante es que hagamos todo a la perfección: la suerte es lo único que no está bajo nuestro control. Sabemos que podría ser suficiente con subir al podio", declaró Alonso.
"Confío en mí mismo y en el equipo, y lucharemos hasta el final. Somos honestos con nosotros mismos y con nuestros aficionados: sabemos que no somos súper competitivos, pero si aún estamos en la pelea, es gracias al equipo, que es el mejor de todos", manifestó el capitán de Ferrari. "Tendremos algunas pequeñas mejoras, pero los demás también las llevarán, con lo que la situación no cambia mucho. Quizás encontrar una buena puesta a punto pueda marcar la diferencia, o la forma en que el coche se adapte al circuito", indicó Fernando, que cuestionado acerca de si ganar el título sería una venganza por lo sucedido en Abu Dabi 2010 -cuando perdió el Mundial en la última carrera, en favor de Vettel, respondió: "No, creo que nos haría muy felices. Y al noventa y nueve por ciento de la gente.... aunque quizás no a los de Red Bull. Ferrari es algo especial, con todo el mundo dando el cien por ciento o más, puesto que se sienten parte de esta familia", afirmó. "No sólo en Fórmula Uno, también en la parte industrial, porque cuando ven pasar un Ferrari por la calle saben que una parte de ese coche, por muy pequeña que sea, la han hecho ellos", manifestó Alonso