La selección nacional encajó el tanto decisivo a falta de 19 segundos para el final de la prórroga

España se queda a las puertas de su tercer entorchado

No pudo ser. España cayó derrotada ante Brasil (2-3) en el último minuto de la prórroga de la final del Campeonato del Mundo de Fútbol Sala de Tailandia, tras realizar un gran encuentro ante un gran rival. 

España mostró más decisión en el inicio del encuentro, presionando a Brasil y optando por el ataque y control del juego, ante una Brasil, que a pesar de verse presionado mostraba tranquilidad.

La primera ocasión fue para Lozano, España desequilibraba individualmente y Brasil, se mostraba vulnerable, respondiendo en ocasiones con dureza.

Brasil no lograba seguir el ritmo marcado por los nuestros y, cuando tenían el balón les costaba finalizar las jugadas. La selección jugaba de maravilla, asfixiando al rival pero, el gol tardaba en llegar. A falta de cuatro minutos el juego se equilibró y, el marcador no se alteró, al término de los primeros veinte minutos.

En el reinició ambos equipos de nuevo salieron mostrándose mucho respeto pero, Brasil mejoró, obligando a Juanjo a intervenir. En el minuto 24, Neto adelantaba a Brasil de fuerte disparo. Un jarro de agua fría que, sin embargo hizo reaccionar a España.

Arriesgaba el combinado nacional y defendía Brasil, esperando su oportunidad, hasta que en el minuto treinta y después de una falta cometida a Fernandao, centró Kike para que Torras batiera a Tiago.

Un minuto después, tras saque de falta, lo hacía Aicardo, poniendo por delante a España. Buscó más la portería española la selección sudamericana y, la 'Roja' pasó a defender y buscar la contra.

El partido se iba a decidir por detalles porque ambos equipos defendían al límite y las ocasiones claras de gol escaseaban. El tercero para los nuestros a punto estuvo de llegar, de nuevo tras el saque de una falta, cuando Torras envió el balón al larguero y en la misma acción Falcao empataba, tras pasar Brasil a jugar con portero jugador. Faltaban cuatro minutos y ninguno de los dos arriesgó, llegándose así a la prórroga.

Miguelín contó con una gran ocasión en los primeros cinco minutos y también Brasil llegó con peligro pero el empate permaneció. En los segundos cinco, Juanjo detuvo un lanzamiento de diez metros a Rodrigo y, cuando parecía que la final se iba a decidir en los penaltis, llegó el gol de Rodrigo a falta de diecinueve segundos que fue insalvable para España.