Este aumento de la tasa anual de inflación responde, en gran medida, a la evolución de los servicios y en especial al encarecimiento de la enseñanza universitaria.
La inflación subyacente (que excluye productos energéticos y alimentos frescos) aumentó con más intensidad y se situó en el 2,5%, 0,4 puntos más que en septiembre. Esta aceleración responde también al sector servicios y, en mucha menor medida, a la alimentación elaborada donde se está dejando notar la subida de los aceites.
Los productos energéticos, tras la fuerte aceleración de los tres meses anteriores, moderan su tasa anual en 2,2 puntos porcentuales, hasta el 11,2%. Los alimentos frescos reducen también su tasa anual, hasta el 2,7%, una décima menos que un mes antes. Los alimentos elaborados vieron aumentar su tasa tan sólo una décima, del 2,9% al 3%, ya que aunque los aceites se elevaron del 0,6% al 6% otras partidas actuaron en sentido contrario (por ejemplo, tabaco, que se suavizó de 7,9% a 6,2%).
Los precios de los servicios elevan su tasa anual en ocho décimas, hasta el 2,6%, repunte que responde principalmente a la subida de la enseñanza universitaria que ha subido desde el 4,3% del mes anterior hasta el 22,4% de octubre.
Dentro de los servicios podría resaltarse también el salto de los servicios de cuidado personal (de 1,6% a 4,1%) y la partida de hoteles y otros alojamientos (de 0,9% a 1,4%). En cambio, los bienes industriales no energéticos (BINES) mantuvieron su tasa anual en el 2% dentro de los BINES se aprecia un aumento de la tasa de vestido y calzado, desde el 0,2% de septiembre hasta el 0,4% el mes siguiente, mientras que en sentido contrario los automóviles cayeron del 2,5% anual a 1,6%.
La tasa mensual del IPC recoge una subida del 0,8% que se explica por el notable crecimiento de los precios de los servicios (0,6%). Esto es igualmente consecuencia de la subida de un 22,3% de los precios de la enseñanza universitaria. También han influido los BINES (3%), en concreto por vestido y calzado (10,5%), debido al inicio de la temporada de otoño e invierno.
La subida del aceite (5,8%) ha impulsado igualmente el conjunto de la alimentación elaborada. En sentido contrario cabe mencionar a los productos energéticos que han disminuido un 1,8%, como resultado de la reducción de casi todas sus partidas, con excepción de gas ciudad que ha mantenido los precios.
También en este sentido cabe mencionar la electricidad (-1,9%), viaje organizado (-3,6%), hoteles y otros alojamientos (-5,5%), automóviles (-0,8%) y pescado fresco (-2,2%).
El INE ha publicado también el IPC armonizado (IPCA) de octubre, cuya tasa anual se sitúa en el 3,5%, igual que la registrada en el mes anterior. Al comparar con la tasa anual estimada por Eurostat para el conjunto de la zona euro (2, 5%), el diferencial sería desfavorable a España en un punto, frente a los 0,9 puntos porcentuales del mes anterior.
Por su parte, el IPC a impuestos constantes ha experimentado también un aumento de 0,8% mensual, lo que se traduce en el alza de una décima de su tasa anual, hasta 1,5%. De nuevo los servicios es el grupo que ve elevar más su tasa anual, de un -0,2% en septiembre a 0,5% en octubre, comportamiento que es seguido aunque con menor intensidad por los alimentos elaborados, que pasan de 1,4% en septiembre a 1,6% en octubre. Los bienes industriales mantienen también su tasa anual, en este caso en el -0,2% mientras que los productos energéticos la ven reducirse de 10,7% a 8,6%.
La evolución de los precios en octubre refleja el impacto de algún resto marginal del IVA que no fue repercutido el pasado septiembre. Destaca en especial la subida de las tasas universitarias que han tenido una repercusión inflacionista de más de una décima, y también la continuación de la subida de algunos productos alimenticios como el aceite. En principio estas alzas tendrían un efecto transitorio sobre la tasa de inflación, cuyo impacto se descontará en octubre de 2013.
Los precios se han mantenido durante el mes de octubre en una senda de moderación, tendencia que deberá afianzarse en los próximos meses. La evolución reciente recoge los efectos derivados de las medidas de consolidación fiscal, necesarias para reducir los desequilibrios a medio plazo.
El impacto en precios es, por tanto, transitorio y se absorberá en los próximos meses. Este efecto, junto con el mejor comportamiento de otros productos, permite anticipar una trayectoria de los precios más acorde con la actual situación de la economía española.