Ante las acusaciones vertidas por el Sindicato Médico Profesional de Asturias (SIMPA) en relación con el impedimento del derecho a la huelga a los trabajadores, el Servicio de Salud del Principado de Asturias (SESPA) manifiesta que:
- La administración sanitaria ha respetado escrupulosamente los trámites que establece la legislación vigente para fijar los servicios mínimos ante la convocatoria de huelga del SIMPA, que han sido previamente negociados y finalmente establecidos por la autoridad competente.
- La amplitud de los servicios mínimos se fundamenta en los criterios que identifican la actividad considerada esencial para salvaguardar la prestación de la asistencia pública sanitaria a los ciudadanos. Como recoge la ley, el establecimiento de estos servicios obliga a designar a un determinado número de trabajadores que, por tanto, no puede participar en la huelga, ya que la cobertura de los servicios mínimos es ineludible y su incumplimiento puede constituir una falta disciplinaria individual.
- Igualmente, el procedimiento utilizado para la designación individual de los trabajadores encargados de cubrirlos pretende garantizar la posibilidad de ejercitar el derecho a la huelga, manteniendo la actividad asistencial esencial.
Desde el inicio del conflicto la administración sanitaria ha salvaguardado el derecho de los trabajadores a acudir a la huelga, garantizando siempre los servicios mínimos esenciales para ofrecer una adecuada cobertura sanitaria y protegiendo el derecho a la salud de los ciudadanos.
Incidencia de la huelga
Por otra parte, la huelga convocada hoy por el SIMPA en la sanidad pública asturiana ha tenido una incidencia del 1,21% en atención primaria y del 7,54% en especializada. El dato ponderado de seguimiento se sitúa en el 5,69%.
En atención primaria, el paro ha sido secundado por un total de doce profesionales en el conjunto de las áreas sanitarias.
En los hospitales se han sumado a la huelga 182 facultativos, fundamentalmente del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), donde se registró una incidencia del 8,82%, y el hospital Vital Álvarez Buylla de Mieres, con un seguimiento del 13,95%.