Un estudio sobre la avifauna en España, publicado por la organización conservacionista SEO/BirdLife, asegura que las especies de aves que viven más próximas a los enclaves rurales muestran un declive notable de su población.
Un estudio sobre la avifauna en España, publicado por la organización conservacionista SEO/BirdLife, asegura que las especies de aves que viven más próximas a los enclaves rurales muestran un declive notable de su población.
En este sentido, especies como el jilguero, el pardillo, la tórtola o la perdiz roja, además de la lechuza, la golondrina o el gorrión han reducido su población en el territorio español en los últimos años.
Según sus estimaciones, el número de golondrinas respecto a 1998 ha disminuido un 20%, “lo supone la desaparición de muchos millones de ejemplares”, subrayan. Su población en España se estimó en unos 30 millones en 2006 y desde ese año hasta 2011 el declive estaría en torno al 10%, por lo que habría tres millones menos de ejemplares que hace tan solo seis años.
“Estas especies, tan cercanas al ser humano, ven transformarse los mosaicos agropecuarios y los entornos rurales en los que se mueven, y responden con declives próximos, incluso, al cuarenta por ciento”, explica la organización.
El trabajo hace hincapié en la pérdida de tres millones de golondrinas, ocho millones de gorriones y un 40% de lechuzas y mochuelos en los últimos años en España.
Por el contrario, la superficie forestal ha aumentado, muchos bosques han madurado y, como consecuencia, las aves ligadas a este medio tienen una evolución positiva.
FOTO: La lechuza común es una de las especies que ostenta mayores declives. Imagen: Iván Corbacho de la Herrán.