Madrid, - Los Ministros de Pesca de la UE han alcanzado un acuerdo parcial sobre la propuesta de la Comisión Europea para el Nuevo Fondo Marítimo y Pesquero, que sustituirá al anterior Fondo Europeo de Pesca (FEP).
Este acuerdo permite el uso de subsidios para la modernización de buques (15 por ciento de los fondos disponibles para cada Estado Miembro hasta 2017), nuevos motores y pago de las pérdidas de los pescadores por las paradas biológicas y el cierre de las pesquerías. Según WWF, la financiación de motores en el pasado, en su mayoría con potencia superior a la legal (500 CV en el Mediterráneo), se ha convertido en la principal causa de sobrepesca en nuestras aguas.
WWF cree que los Ministros de Pesca han fracasado acordando un paquete de compromisos que no apoya los objetivos de una reforma ambiciosa de la Política Común de Pesca (PCP). La organización denuncia que el acuerdo alcanzado asegura fondos que contribuyen a la sobrecapacidad y sobrepesca. Alemania ha sido de los pocos países que se ha opuesto a las ayudas a la modernización y al mantenimiento de las ayudas al cese temporal de la actividad.
Según Raúl García, responsable de Pesca de WWF España: “Si el acuerdo de los Ministros sale adelante, estaríamos retrocediendo diez años en el uso del dinero público para la pesca y la conservación del mar, deshaciendo el camino recorrido en los últimos años. Por ello, hacemos un llamamiento a nuestros representantes en el Parlamento Europeo para que enmienden este error y logren un marco financiero que sufrague exclusivamente la transición de la flota europea a la sostenibilidad ambiental y socioeconómica”.
WWF cree que los gobiernos europeos, pese a su retórica sobre la necesidad de detener el agotamiento de las pesquerías, no han estado a la altura de las circunstancias de los tiempos ni de las necesidades que vivimos. Si la propuesta de los Ministros prospera, cerca de 7.000 millones de euros de los contribuyentes se destinarán a mantener el estatus quo, apoyando actividades destructivas, injustificadas y no realistas de pesca, así como apostando a ciegas por la acuicultura, sin las directrices adecuadas para asegurar su sostenibilidad.
Según WWF, la financiación pública debe destinarse solo a la conservación de recursos y ecosistemas marinos de los que depende la actividad pesquera, al diseño y puesta en marcha de los planes de gestión multianuales territorializados, al establecimiento de comités de cogestión para cada pesquería, a los incentivos destinados a las artes selectivas y prácticas no destructivas, al seguimiento científico y de la actividad pesquera, así como a su control.
Ante la falta de visión de los Ministros europeos en la reforma de la PCP, WWF ha lanzado una campaña online de movilización de los ciudadanos de toda la UE para que presionen al Parlamento Europeo con el objetivo de que detengan estos errores y reorienten la futura PCP de forma que asegure la sostenibilidad de las pesquerías y de la industria pesquera. Todos los ciudadanos pueden participar ya en una ciberacción, llamada “Detengamos la Bancarrota de nuestros océanos”, que le llegará directamente a los miembros del Comité de Pesca llamándoles la atención sobre este problema.
FOTO: 'CC BY-3.0-ES 2012/EJ-GV/Irekia-Gobierno Vasco/Mikel Arrazola'