Alrededor de 870 millones de personas en el mundo están subnutridas, y más de 2,5 millones de niños mueren cada año de desnutrición. Hacer frente a esta terrible situación es una prioridad para la Unión Europea y para la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
El Presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, se reunió en Bruselas con el Director General de la FAO, José Graziano da Silva. Ambos estuvieron de acuerdo en que la UE es un socio estratégico clave para la FAO y debe desempeñar un papel relevante en el seno de la Organización. Abordaron la cuestión de la seguridad alimentaria, incluidas las políticas de desarrollo, capacidad de resistencia y nutrición, así como las cuestiones de gobernanza mundial. El miércoles, Graziano da Silva se reunió también con el Comisario europeo de Desarrollo, Andris Piebalgs, Comisario de Agricultura y Desarrollo Rural, Dacian Ciolos y con la Comisaria de Asuntos Marítimos y Pesca, Maria Damanaki.
Barroso aseguró que: "me satisface recibir hoy en Bruselas al Director General Graziano da Silva. Somos aliados en la lucha contra la desnutrición entre los más pobres del planeta y en la promoción de la seguridad alimentaria mundial. La UE es por consecuencia la mayor fuente de financiación voluntaria de la FAO. Para la Comisión Europea, la seguridad alimentaria es una prioridad clave en todo el mundo. La UE es ya el mayor donante de ayuda para combatir la inseguridad alimentaria y la nutrición y vamos a intensificar nuestros esfuerzos en el próximo Marco financiero plurianual. La UE sigue plenamente comprometida con los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) y con la meta de la ayuda al desarrollo del 0,7% del PIB en 2015. La Unión Europea seguirá apoyando la reforma en curso de la FAO a nivel político, operativo y financiero".
Un socio valioso
Graziano da Silva afirmó por su parte que: "la Unión Europea es un socio valioso para la FAO. Estamos trabajando juntos en el plano mundial y nacional para promover la seguridad alimentaria y el desarrollo agrícola sostenible. Los nuevos datos sobre el hambre muestran que vamos encaminados a alcanzar la meta de los ODM de reducir a la mitad la proporción de personas que padecen hambre. Pero tenemos que mirar más allá y apuntar a la erradicación total del hambre, respondiendo al desafío Hambre Cero lanzado por el Secretario General de la ONU, Ban Ki-Moon, en la Conferencia de Río +20. Cuando se trata del hambre, la única cifra aceptable es cero".
Graziano da Silva y Barroso señalaron que los gobiernos y las comunidades nacionales e internacional tienen un papel importante que desempeñar. Hicieron hincapié en la necesidad de fortalecer los mecanismos de gobernanza mundial, como el Comité de Seguridad Alimentaria Mundial y el Sistema de Información de los Mercados Agrícolas (AMIS, por sus siglas en inglés), precisando que una mayor transparencia y coordinación de los mercados están ayudando a evitar alzas en los precios internacionales de los alimentos. Ambos reafirmaron igualmente el compromiso de la FAO y la UE de apoyar los esfuerzos a nivel nacional y regional y las acciones dirigidas a promover el crecimiento sostenible e inclusivo y mitigar el impacto del alza de precio de los alimentos en la seguridad alimentaria local.
En sus reuniones con los Comisarios Piebalgs, Ciolo? y Damanaki, Graziano da Silva debatió diversos asuntos relacionados con la cooperación entre la FAO y la UE, incluyendo el Año Internacional de la Agricultura Familiar -que se celebra en 2014-, así como el desarrollo rural, la volatilidad de precios de los alimentos, la gobernanza mundial de la seguridad alimentaria - -que La FAO quiere reforzar-y la necesidad de promover un crecimiento económico a largo plazo que favorezca a los pobres. En este objetivo se trató de la importancia de la creación de resiliencia, la creación de entornos favorables para los sectores productivos, el apoyo a los pequeños productores y el fortalecimiento de la protección social.