Caracas.- El gobernador de Miranda y ex candidato presidencial, Henrique Capriles Radonski, pidió a todos los venezolanos ponerse de pie y activarse para seguir trabajando por el futuro. “Una cosa es la tristeza y otra cosa es el esfuerzo, el camino no se acaba. Los que todavía sientan tristeza, vean lo que paso el día domingo, logramos que más de 6 millones y medio de personas se montaran en el Autobús. El pueblo no decidió que es la hora del futuro, pero la grandeza esta en levantarse rápido. La democracia es así. Cuando la Vinotinto pierde un juego, salimos del estadio con el guayabo, pero en el siguiente juego estamos apostando a ella. Nuestro próximo juego son las elecciones de gobernadores y estuvimos revisando y sí nos movilizamos y trabajamos en equipo, podemos cambiar la realidad que tenemos hoy en el país a nivel regional”.
Descartó la posibilidad de fraude en el proceso comicial. “Aquí no hubo fraude. Los principios no se negocian. Yo no negocio la voluntad de los venezolanos ni no lo negociaré nunca. Pero si los resultados, no me favorecen, debemos reconocerlo. Lo que el pueblo diga es sagrado, el reto es ganarnos al pueblo. Soy un demócrata y no nos vamos a prestar a la antipolítica y el radicalismo, que tanto daño ha hecho al país. La verdad es que ganó el Gobierno central, no Venezuela. Me enfrenté a una maquinaria con muchos recursos, con medios públicos que maneja a su antojo y para desacreditarme, fue brutal lo que enfrentamos el domingo. Yo no llegué ofreciendo casas, porque no estoy en el ejercicio del Gobierno. El crecimiento que hemos tenido no tiene punto de comparación, es la votación más importante que hemos logrado desde 1998. Esta una opción que no podemos destruir. Vamos todas a seguir construyendo este camino. Construimos una casa que tiene más de 6 millones adentro y quiero que siga creciendo. El camino no es una trocha, es un camino que convertirá en una autopista.
No planteo pacto entre élites. Derrote la vieja política en Venezuela fui yo, no el Presidente”.
Capriles Radonski destacó que el nuevo reto de la unidad es aumentar los espacios que tiene a nivel nacional. “Debemos seguir construyendo una estructura que aún no está montada. Esto es un juego y si usted no acude, le regala el juego al otro. Cada uno de nosotros tiene que pensar en ese futuro, fueron millones de David que salieron ese día. Goliat venció a David en esta oportunidad. Pero tenemos un nuevo reto dentro de poco días y debemos proponernos ganar en muchos los estados. No esperemos que las cosas se dan solas. El camino no es solo votar. El camino hay que construirlo todos los días, revisar lo que se hizo bien y mal, fortalecer lo bueno y rectificar lo malo. Si antes me sentía con fuerza, ahora tengo más fuerza y más compromiso. Este es el juego del futuro y estamos empezando a jugarlo. Encendimos una llama que seguirá estando allí. A todos los aspirantes a alcaldes, les pido que trabajen duro para convertir en gobernador a sus candidatos”.
Dijo que decidirá en las próximas horas si competirá por la reelección en Miranda. “Estamos en un proceso de consulta, aún no he tomado la decisión, pero amo al pueblo mirandino. Si decidimos optar por la gobernación de Miranda, visitaremos todo el estado y sacaremos tiempo para ir a otros estados. Soy un líder que le gusta escuchar a todo el mundo, donde quiera que esté. Hoy sigo siendo gobernador, porque el pueblo no decidió que fuera Presidente. Si ganábamos el camino tendría más responsabilidad, si no ganábamos nos correspondía liderar la construcción de un alternativa”.
El Gobernador de Miranda acotó que el reto del Gobierno central es mandar para todos “A todos nos conviene un país equilibrado. Hay dos visiones, una respaldada por más de 6 millones 500 mil de personas y otra de 8 millones. Esos 8 millones de venezolanos tienen expectativas y el Gobierno debe satisfacerlas. El pueblo es el que cobra y no debemos subestimar nunca el pueblo. Ojalá el Gobierno viera que el modelo que pretende ejercer no funciona. Tiene que entender que más de 6 millones de personas también viven aquí. Un país dividido no avance. Solo esperamos que los diálogos se traduzcan en hechos. El país espera que la inflación baje, que se generen oportunidades y que se le busque solución real a la inseguridad. El Gobierno está en 3 y 2, y nosotros vamos a estar vigilando, porque todo lo que se le prometió al pueblo debe dárselo”.