La Primera Mandataria destacó la necesidad de aumentar la cooperación Sur-Sur para que los países de esa región “sean menos vulnerables a las crisis de los países emergentes”.
Cristina afirmó que un fuerte aporte a la paz y la seguridad del planeta sería “lograr que Palestina sea recibida como estado dentro de su territorio y como miembro pleno de las Naciones Unidas” y tras ratificar su “solidaridad” con la causa palestina, señaló que esa expresión “no la hacemos desde un lugar meramente ceremonial” sino “porque sabemos lo que significa la ocupación territorial”.
“Sufrimos en nuestras Islas Malvinas la ocupación territorial y somos un país que todavía tiene un enclave colonial en el siglo XXI”, afirmó.
Cuestionó el “doble standard” de los países miembros del Consejo de Seguridad de la ONU que “pueden violar todas las resoluciones” de ese organismo multilateral.
“Lo vivimos en carne propia, como lo vive en carne propia el pueblo palestino”, dijo, al recordar que las resoluciones que demandan negociaciones sobre la soberanía de las Islas Malvinas “son absolutamente desoídas por el Reino Unido, como otros países desoyen la necesidad de que Palestina cuente con un territorio independiente”.
Consideró que “lo que hay que terminar es con un nivel de hipocresía que siento en muchísimas reuniones donde todos sabemos de qué se trata, damos discursos y nos vamos y todo sigue igual o peor, porque después de cada reunión nos encontramos con que se ha desatado un nuevo conflicto”.
Afirmó que “el secretario general de la Liga Árabe destacó la necesidad urgente de cortar, y coincido absolutamente con él, el nudo gordiano de la cuestión de Medioriente, y en cuanto a la seguridad del mundo, que es lograr que Palestina sea recibida como estado dentro de su territorio y como miembro pleno de la ONU”.
También insistió en el reclamo de no proliferación nuclear como “tema clave en la cuestión de Medioriente” y acotó que lo hace “con la autoridad moral de ser un país con gran desarrollo nuclear” pero de usos exclusivamente pacíficos.
“Vivimos momentos muy difíciles, no sólo por lo que está pasando en Siria, donde abogamos como todos por una solución negociada, sin intervencionismo extranjero”, advirtió.
Alertó sobre la “creciente tendencia de los países que causaron la crisis, de volcar las consecuencias de la crisis en países como nosotros, emergentes, que con nuestro crecimiento hemos sostenido el crecimiento mundial”.
Demandó entonces la “solución pacifica de los conflictos, un multilateralismo a rajatabla, de respeto a las resoluciones de la ONU, soluciones a los conflictos mediante negociaciones, reforma del Consejo de Seguridad de la ONU” porque “hoy el problema no es el holocausto nuclear, sino que radica en conflictos focalizados que tienden a excederse en determinada región y arrastrar al mundo a partir del pingüe negocio de industria armamentos que está en los países desarrollados”.
Se pronunció también en contra del proteccionismo que existe en los países centrales
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner participó hoy en Lima de la III Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de América del Sur y Países Árabes (ASPA), que se llevó a cabo en la sede del Ministerio de Cultura, en la capital peruana y a las 16.30 hora argentina partió de regreso al país.
Tras hablar ante los mandatarios presentes, la Presidenta mantuvo una reunión con el Rey de Jordania,
Abdullah II ibn AL HUSSEIN.
La Cancillería informó que durante esa entrevista ambos mandatarios destacaron el alto nivel alcanzado en la relación bilateral jordano-argentina y repasaron la agenda regional e internacional.
El Rey de Jordania solicitó a la Primera Mandataria argentina interceder en la concreción de un acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y su país. Por otro lado, valoró el alto grado de desarrollo argentino en materia nuclear, espacial y agrícola, subrayando las posibilidades de la cooperación Sur-Sur en dichos ámbitos para Jordania y los países árabes.
Los mandatarios, acompañados por sus cancilleres, se refirieron a la situación en Siria, coincidiendo en la necesidad de poner fin a la violencia y en el rechazo a la intervención extranjera en el conflicto interno de ese país. Destacaron la necesidad del reconocimiento del Estado Palestino por parte de la Comunidad Internacional y del derecho del Estado de Israel a vivir en paz con sus vecinos.
Coincidieron también en la importancia de la profundización del foro ASPA en beneficio de los países miembros de la UNASUR y de la Liga Árabe y en el éxito de la III Cumbre.
Hacia el fin de la jornada se adoptó la Declaración de Lima que incluyó una serie de propuestas impulsadas por la Argentina y que fueron enfatizadas en la intervención de la Presidenta Fernández de Kirchner, entre las cuales se destacan:
- El apoyo a la posición argentina en la Cuestión Malvinas y el rechazo a la explotación unilateral hidrocarburífera que llevan adelante los británicos, así como el llamado al Reino Unido a abstenerse de realizar ejercicios militares en la zona en disputa.
- El reclamo a un acceso más justo a los mercados de los países desarrollados específicamente a través de la eliminación de subsidios al agro que distorsionan el comercio internacional.
- El reconocimiento del derecho a los usos pacíficos de la energía nuclear de los países miembros del TNP sujetos a salvaguardias internacionales, así como el llamado al desarme nuclear. Ponderándose en este marco el alto grado de desarrollo de la industria nuclear argentina y su vocación a la transferencia tecnológica Sur – Sur que ya ha dado lugar a la construcción de reactores de investigación en Argelia y Egipto así como aspectos de cooperación nuclear con países de la pe
La jornada había comenzado esta mañana cerca de las 8.30 hora local (10.30 en Buenos Aires) cuando el presidente de Perú, Ollanta Humalla, comenzó con el tradicional saludo oficial con los mandatarios y representantes internacionales que llegaron a este país para participar del foro biregional.
Al finalizar el saludo se realizó la inauguración de la III Cumbre de ASPA, en el Gran Teatro Nacional, ubicado en el ministerio de Cultura local, donde expusieron el presidente de la Cumbre Árabe, Hshyar Zabari; la presidenta de Brasil, en nombre de la Coordinación Regional Sudamerciana, Dilma Rousseff; el secretario general de la Liga Árabe, Nabil El Arby; y el presidente anfitrión, Ollanta Humalla.
Al mediodía (10 hora local) comenzó la primera sesión plenaria de Jefes y Jefas de Estado birregional. La Presidenta fue será la tercera oradora de la sesión, después del Rey de Jordania, Abdullah Bin Al-Hu, y el presidente de Ecuador, Rafael Correa. Durante la primera sesión fueron 15 los oradores y luego se procedió a la realización de la foto oficial de la Cumbre.
También expusieron los presidentes de Túnez, Moncef Marzouki; Chile, Sebastián Piñera; Líbano, Michel Sleiman; Uruguay, José Mujica; Colombia, Juan Manuel Santos; y Bolivia, Evo Morales.
Asimismo lo hicieron el presidente del Consejo de la Nación de Argelia, Abdelkader Bensalh; el viceprimer ministro de Kuwait, Sabah Al Khalid; el ministro de Estado de Marruecos, Abdellah Baha; el ministro de Asuntos exteriores de Arábia Saudita, Nizar vine Obaid Madani; el subsecretario de Asuntos Exteriores de Libia, Hosni Al Habeed; y el ministro de Asuntos Exteriores de Egipto, Mohamed Kamel Amr.
Los países que integran ASPA son, por Sudamérica, Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela.
Por la Liga Arabe, integran el foro Argelia, Bahrain, Comoras, Egipto, Emiratos Arabes Unidos, Iraq, Jordania, Kuwait, Líbano, Libia, Mauritania, Marruecos, Omán, Autoridad Nacional Palestina, Qatar, Arabia Saudita, Somalia, Sudán, Siria, Túnez, Yemen y Yibuti.
Por el bloque de naciones árabes, asistirán el rey de Jordania, Abdullah Bin Al-Hussein; los presidentes de Líbano,Michel Sleiman, y de Túnez, Moncef Marzouki; además del jeque de Qatar, Hamad Bin Khalifa Al Thani.
ASPA fue creado a propuesta del ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva y se celebró por primera vez en Brasilia, en el 2005. La segunda fue en Doha, Qatar y la próxima será en Lima, y busca reeditar las metas que se trazan en temas principalmente económicos y políticos