Ni los pepinos españoles, ni los brotes de soja alemanes. Mientras las investigaciones sobre el origen de la epidemia de E. coli siguen sin dar fruto, el Parlamento Europeo debatió esta mañana el tema con la Comisión. Los eurodiputados españoles exigieron responsabilidades a las autoridades alemanas y reclamaron indemnizaciones para los productores, y el comisario europeo de Salud aseguró que es "fundamental" que las autoridades nacionales no se precipiten a la hora de "comunicar conclusiones sobre el origen de la epidemia".
John Dalli, comisario europeo de Salud y Política de Consumidores, alertó de que este comportamiento "genera miedo" en toda Europa y perjudica a los productores. También subrayó que un veto de todos los productos europeos es "desproporcionado", ya que el brote está limitado geográficamente a la zona circundante de Hamburgo", y explicó que en la tarde del mismo martes se celebraría en Luxemburgo una reunión extraordinaria del Consejo europeo de Agricultura.
"El enemigo es la bacteria"
El alemán Peter Liese, del grupo del Partido Popular Europeo, consideró que "ha habido problemas en la gestión de la crisis" pero que "si hay una información debe ser publicada". Aseguró que la titular de Sanidad de Hamburgo "informó a la opinión pública", una decisión que calificó de "correcta a pesar de que no hubo certidumbre al 100%", aunque admitió que " pasó bastante tiempo hasta informar de nuevo y eso hay que subsanarlo". "Hay que centrarse en que el enemigo no está ni en España ni en Alemania y que el problema es un agente patógeno", agregó, animando a abordar resistencia de la bacteria a los antibióticos para poder combatir futuros brotes.
Por su parte, la británica Linda McAvan, del grupo de los Socialistas y Demócratas europeos, consideró que "hay que investigar a largo plazo y sacar lecciones pertinentes", así como establecer un "tipo de etiquetado" que permita identificar la fuente del problema. "No es normal que los europeos salgan a tomar una ensalada y se mueran", añadió, preguntándose si el mercado tiene más importancia que el consumidor final.
"La prioridad son los seres humanos"
Corine Lepage, eurodiputada francesa del grupo de la Alianza de los Demócratas y Liberales europeos, exigió actuar según "el principio de precaución" e insistió en que "la prioridad son los seres humanos antes que las consecuencias económicas".
Según el conservador británico James Nicholson, la situación "ha puesto de manifiesto que no nos podemos precipitar con nuestras conclusiones". "Comprendo la ira de los cultivadores españoles", aseguró, para puntualizar después que "a ellos les podemos compensar, pero no podemos recuperar las vidas que hemos perdidos".
Problema de comunicación
La alemana de Los Verdes Rebecca Harms afirmó que esta "lamentable" situación "ha puesto de manifiesto que ni Alemania ni la UE están preparados para un brote de estas dimensiones". Opinó que existe "un problema de comunicación entre laboratorios y políticos", que provoca "un desfase entre actuación científica y decisión política", por lo que consideró necesario "definir una autoridad centralizada a nivel europeo que pueda tomar las decisiones oportunas".
La también alemana Sabine Wils, del grupo Izquierda Unitaria Europea/Izquierda Verde Nórdica, advirtió de los "problemas sistémicos de la producción masiva de alimentos en un sistema liberalizado" y, por ello, consideró que "la trazabilidad del origen de los alimentos es imprescindible para la seguridad alimentaria". Alemania "ha fracasado en la gestión de la crisis", aseguró, apuntando que "las autoridades de vigilancia se han visto superadas".
Francisco Sosa-Wagner, eurodiputado español que no está adscrito a ningún grupo político, exigió "indemnizaciones" para los perjudicados. "Soy nieto de alemán y tengo gran cariño por ese país, pero es evidente que sus autoridades han actuado con precipitación e imprudencia", afirmó, y calificó la actuación de la Comisión como "desvaída, apagada e imprecisa". "No ha sabido ni coordinar ni dirigir", dijo. Con un pepino en la mano, reivindicó "el honor perdido de los productores de pepinos" y propuso "organizar una muestra de gastronomía europea basada en el pepino".
"Hay que ser prudentes"
En respuesta a las intervenciones de los diputados, el comisario Dalli afirmó que el objetivo principal es "que cada vez menos gente sea ingresada en el hospital" por lo que hay que identificar la causa. "Hay que ser prudentes y mantener la calma, porque es muy fácil acusar y hacer declaraciones a toro pasado, es mucho más difícil reaccionar frente a la crisis", argumentó.
FOTO: El comisario europeo John Dalli durante el debate en el PE
FUENTE:PE