El FMI acaba de publicar su nuevo programa de trabajo en un momento en que la economía
mundial sufre los embates de la constante incertidumbre en Europa, los levantamientos en
Oriente Medio y los indicios de sobrecalentamiento de algunas economías de mercados
emergentes en rápido crecimiento.

El nuevo programa de trabajo ha sido elaborado teniendo en cuenta precisamente estas
vulnerabilidades. En preparación para las Reuniones Anuales de septiembre de 2011, el FMI se
concentrará en una serie de informes nuevos sobre los “efectos de contagio” para poder
comprender más a fondo la naturaleza interconectada de la economía mundial y, así, respaldar
mejor la colaboración en materia de políticas a nivel mundial. Entre otras iniciativas
prioritarias, cabe mencionar análisis más avanzados de los flujos de capital y fortalecimiento
del respaldo a favor de los países de bajo ingreso.

El Director del Departamento de Estrategia, Políticas y Evaluación del FMI, Reza Moghadam,
expone en una entrevista las prioridades para el FMI durante los seis próximos meses.
Boletín Digital del FMI: En su opinión, ¿cómo contribuirá el FMI a los planes de acción
posteriores a la crisis?
Moghadam: La crisis ha dejado numerosas secuelas. Los países están comenzando ahora a
abordar los efectos fiscales de la crisis, el saneamiento y la reforma del sector financiero están
incompletos, y el ritmo y la calidad del crecimiento son motivos de preocupación para nuestros
187 países miembros. Todo esto nos exige planes muy intensivos como institución, y el nuevo
programa de trabajo es precisamente el tipo de plan previsor que requiere el frágil entorno
mundial.

El FMI se encuentra excepcionalmente situado para entablar un diálogo con los gobiernos
sobre temas de preocupación nacional e internacional, tanto desde el punto de vista del
asesoramiento en materia de políticas y los análisis que puede proporcionar como desde el
punto de vista de la cooperación internacional que puede facilitar. Permítame citar algunos
ejemplos.
Nuestra supervisión bilateral regular promueve un diálogo constructivo con las autoridades
nacionales sobre cuestiones de política fundamentales, en tanto que nuestros productos más
importantes —Perspectivas de la economía mundial, el informe sobre la estabilidad financiera
mundial, el informe Fiscal Monitor y el Ejercicio de Alerta Anticipada— analizan la evolución
económica y financiera desde una perspectiva internacional.

Los próximos informes sobre los efectos de contagio, que se concentran en cinco países o
regiones de importancia sistémica, arrojarán nueva luz sobre la naturaleza de los vínculos entre
los países en el plano de la economía y de sus políticas. También elaboraremos un informe
consolidado sobre la supervisión multilateral para el Comité Monetario y Financiero
Internacional, el órgano que orienta las políticas del FMI. Ese informe será debatido durante las
Reuniones Anuales de 2011 para que las máximas autoridades puedan abordar directamente los
mensajes más críticos de nuestros productos dedicados a la supervisión y las implicaciones para
las políticas de los países y del propio FMI.

El FMI también continúa respaldando los esfuerzos del Grupo de los Veinte (G-20), integrado
por las principales economías avanzadas y de mercados emergentes, para promover la
colaboración en materia de políticas. En particular, el Proceso de Evaluación Mutua del G-20,
que se apoya en los análisis realizados por el FMI, ha sido un vehículo muy importante para el
diálogo sobre las políticas y se ha centrado en los desequilibrios internos y externos de cada
país.
Boletín Digital del FMI: ¿Qué se está haciendo para fortalecer el asesoramiento y los
análisis del FMI en el terreno de las políticas? ¿Y qué le aportan a esa labor los nuevos
informes sobre los efectos de contagio que acaba de mencionar?
Moghadam: El tremendo aumento de los vínculos comerciales y financieros entre los países
ofrece grandes oportunidades de inversión y crecimiento, pero también significa que cada país
está más expuesto a los denominados “efectos de contagio” originados en otros países.

Por ende, el FMI está estudiando cómo puede respaldar la colaboración sobre las políticas una
comprensión más cabal de la naturaleza interconectada de la economía mundial. Este año,
estamos llevando a cabo un análisis exhaustivo de los efectos de contagio externos originados
en las cinco economías más grandes del mundo: China, Estados Unidos, Japón, el Reino Unido
y la zona del euro. Los resultados de ese trabajo se presentarán en una serie de “informes sobre
los efectos de contagio”, junto con el informe sobre la consulta anual del Artículo IV de cada
país, y las lecciones extraídas se volcarán en un informe general.

Mediante el esclarecimiento del impacto de las políticas de un país o región en los demás,
esperamos facilitar el proceso de encontrar políticas que promuevan los intereses tanto
nacionales como internacionales.

Boletín Digital del FMI: El FMI también tiene planificada una revisión profunda de la
supervisión que lleva a cabo. ¿En qué se centrará?
El Examen Trienal de la Supervisión estará listo para septiembre de 2011, junto con una
revisión del marco jurídico en el que se encuadra la supervisión. El objetivo principal de ese
examen consiste en lograr que el FMI pueda contribuir mejor a la estabilidad nacional e
internacional a través de una supervisión eficaz de las políticas de sus países miembros.

En particular, analizará cuán bien ubicado está el FMI para detectar riesgos y formular
advertencias al respecto, cuán franco es el asesoramiento que proporcionamos a los gobiernos y
si somos imparciales en nuestro trato con diferentes grupos de países.
Si bien los exámenes anteriores se centraron en la supervisión bilateral, el Examen Trienal de la
Supervisión de 2011 abarcará también la supervisión multilateral y otras actividades vinculadas
a la supervisión, y evaluará cómo encajan nuestros distintos instrumentos de análisis de las
políticas y asesoramiento.

Además de la evaluación realizada por el personal técnico del FMI, habrá expertos externos
que aportarán su opinión sobre temas clave, así como un grupo consultivo que verificará
independientemente el análisis y las recomendaciones del personal técnico.
Boletín Digital del FMI: ¿Habrá más reformas de los instrumentos de préstamo del FMI?
Moghadam: En estos últimos años, el FMI ha dado importantes pasos para mejorar sus
instrumentos de préstamo; por ejemplo, creó la Línea de Crédito Flexible para países con
fundamentos económicos e historiales muy sólidos en la aplicación de las políticas, y la Línea
de Crédito Precautorio para países miembros con fundamentos sólidos pero algunas
vulnerabilidades residuales moderadas.

No debemos cejar en el empeño por mejorar nuestros instrumentos de crédito para atender las
necesidades de los países miembros. Por ejemplo, para comprender mejor la necesidad de
liquidez mundial en momentos de estrés sistémico, estamos examinando con más cuidado las
causas de esta crisis y el suministro mundial de liquidez con que se le hizo frente, a fin de
determinar qué instrumentos de préstamo podrían faltarnos.

Boletín Digital del FMI: En el curso del último año, el FMI ha analizado intensivamente
cómo lograr que el sistema monetario internacional sea menos propenso a la crisis. ¿Qué
más hará en ese terreno el FMI en los próximos meses?
Moghadam: Contribuir a asegurar la estabilidad y la cooperación monetaria internacional es
un elemento central de la misión del FMI. Ya hemos trabajado bastante para mejorar el
funcionamiento del sistema monetario internacional. Ese trabajo, sumado al esfuerzo paralelo
del G-20, ya ha promovido el debate sobre cómo reformar el sistema monetario internacional.

Tenemos previsto evaluar las perspectivas de los mecanismos de ajuste mundiales; por
ejemplo, en el contexto de la supervisión y del Examen Trienal de la Supervisión. También
seguiremos trabajando en los flujos de capital, examinando cuestiones tocantes a los países que
originan flujos de capital y a los que los reciben, en un estudio de próxima publicación titulado
“The Multilateral Aspects of Policies Affecting Capital Flows”.
Continuaremos evaluando el uso de instrumentos macroprudenciales y mecanismos
institucionales conexos, en colaboración con otras instituciones. Y, como he mencionado,
evaluaremos nuevamente las perspectivas de la red mundial de protección financiera y lo que
significa para la prevención y la respuesta a las crisis. Asimismo, tenemos previsto modernizar
el marco de análisis de la política fiscal y la sostenibilidad de la deuda pública.

También estudiaremos cómo afianzar la estabilidad del sistema monetario internacional
diversificando el sistema de reservas mundial y el conjunto de monedas internacionales.
Boletín Digital del FMI: El aumento reciente de los precios mundiales de los alimentos y
los combustibles está golpeando con especial dureza a los países de bajo ingreso. ¿Qué
está haciendo el FMI para brindar respaldo a los países miembros de bajo ingreso?
Moghadam: El FMI se mantuvo muy atento a las necesidades de los países de bajo ingreso
durante la crisis, y tiene previsto redoblar los esfuerzos para ayudarlos a hacer frente a los retos
que plantea la volatilidad macroeconómica repetida, incluido el último fuerte aumento de los
precios de las materias primas.

Tal como hicimos en 2008 ?la última vez que los precios de los alimentos y los combustibles
tocaron máximos? y durante la crisis financiera internacional, el FMI puede ayudar a los
países de bajo ingreso proporcionándoles con rapidez respaldo financiero para proteger la
estabilidad macroeconómica y salvaguardar el gasto social y el gasto en otros ámbitos
prioritarios.

También continuaremos mejorando nuestros instrumentos de políticas y de análisis. En junio el
Directorio evaluará cómo adaptar nuestras políticas a los retos excepcionales que enfrentan los
países en situaciones de fragilidad.
En el ámbito analítico, examinaremos los desafíos extraordinarios que enfrentan los países de
bajo ingreso al intentar administrar sus economías en el contexto de la volatilidad mundial,
basándonos en un nuevo ejercicio de la vulnerabilidad para los países de bajo ingreso.
Analizaremos también qué puede hacer la comunidad internacional para facilitar la creación y
el uso de instrumentos financieros contingentes para este grupo de países.
Evaluaremos así mismo el futuro de dos iniciativas de alivio de la deuda que gestionamos
juntamente con el Banco Mundial y otras instituciones internacionales: la Iniciativa para los
Países Pobres Muy Endeudados y la Iniciativa para el Alivio de la Deuda Multilateral.

Boletín Digital del FMI: El crecimiento sin empleo y la creciente división entre los ricos y
los pobres son motivos de inquietud en muchas partes del mundo. ¿Ajustará el FMI su
asesoramiento en materia de políticas para ayudar a los países a abordar los problemas
combinados de la desigualdad y del desempleo?
No cabe duda de que la calidad del crecimiento tiene un impacto importante en la
sostenibilidad macroeconómica. Los sucesos recientes registrados en Oriente Medio y Norte de
África, junto con el desempleo persistentemente elevado de muchas economías avanzadas
después de la crisis, apuntan a la necesidad de pensar en la estabilidad macroeconómica de una
manera que reconozca que la calidad, las fuentes y la distribución del crecimiento son críticas
para la estabilidad a largo plazo.
Aunque somos conscientes de que la ventaja comparativa del FMI radica en otras áreas,
estamos esforzándonos por apreciar mejor los factores sociales que influyen en la estabilidad
macroeconómica, recurriendo a expertos externos en este campo. Estos factores deben
desempeñar un papel más importante en nuestro análisis y nuestro asesoramiento en materia de
políticas.
La reciente conferencia del FMI sobre políticas macroeconómicas y de crecimiento después de
la crisis es un buen ejemplo de cómo se está adentrando la organización en otros terrenos para
comprender mejor estas cuestiones interrelacionadas.