Barcelona.-El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha manifestado hoy en su mensaje institucional con motivo de la conmemoración de la Diada Nacional de Cataluña que todas las voces que se alzarán mañana en la manifestación de Barcelona, ??"sean por el pacto fiscal, por el estado propio, por el respeto que merecemos como nación pacífica y democrática, o por nuestra dignidad, son todas voces que se alzan en la misma dirección: más justicia y más libertad para Catalunya ".
El jefe del Ejecutivo se ha dirigido en su discurso a los que se manifestarán mañana en Barcelona y les ha asegurado que "mi corazón estará con vosotros" así como "mi espíritu y mi compromiso". Añadió que "aunque sea en silencio, sabed que vuestro clamor es el mío, que su voz es la mía, que vuestros anhelos son los míos".
Artur Mas ha instado a todos los que participarán en alguno de los actos de la Diada a hacerlo "siempre con espíritu de suma, sabiendo que somos y seremos observados, dejando oír nuestra voz, serena y clara, y exhibiendo y proclamando la firmeza de nuestras convicciones, de nuestro compromiso y de nuestra estima por Catalunya ".
Pacto fiscal: "urgente, justo y necesario"
En el mensaje institucional, el presidente Mas ha insistido nuevamente en la necesidad del pacto fiscal y aseguró que "no hay batalla más urgente ni reto más importante que la soberanía fiscal de nuestro país y más en estos momentos". El jefe del Gobierno ha afirmado que el "primer objetivo ampliamente aglutinador y compartido" de la transición nacional que la sociedad catalana está llevando a cabo es el pacto fiscal y aseguró que lo defenderá como "urgente, justo y necesario".
El presidente señaló que la soberanía fiscal es a la vez "un acto de afirmación nacional y de afirmación social, en la medida en que los principales perjudicados en caso de no tenerla son las personas individuales y concretas", por lo que ha manifestó que "aspiramos a más como nación porque aspiramos a más como sociedad, y viceversa". "La plenitud nacional de Cataluña y el bienestar y la cohesión de sus ciudadanos no son elementos contradictorios, sino todo lo contrario", remachó.
"Fe inquebrantable que saldremos"
En diferentes momentos de su discurso, el jefe del Gobierno se ha referido a la situación económica y ha señalado que "son tiempos de decisiones difíciles" y "no precisamente agradables". Dijo que Catalunya se mueve entre "las incertidumbres y debilidades" del proyecto europeo y del euro y "la falta de visión y de sentido de estado que impera en España" y ha señalado que "este escenario que no controlamos nos condiciona el día a día ".
Haciendo un símil náutico, el presidente de la Generalitat ha pedido "no perder el rumbo" porque el país "debe navegar sabiendo que cuando el agua inunda el barco debe sacarla como sea, a ser posible con el esfuerzo de todos ". Por este motivo, ha pedido a todos "no sólo comprensión, sino compromiso e implicación".
El jefe del Ejecutivo ha querido lanzar un mensaje de confianza y ha subrayado su "fe inquebrantable en que saldremos, fortalecidos y con unos valores más firmes y más sanos como personas y como pueblo".
Motivos de esperanza
Artur Mas ha alentado a los ciudadanos a no caer "en el fatalismo o en la desesperanza" pese a que "el presente que estamos viviendo nos pone constantemente a prueba, tanto individualmente como colectivamente". El presidente ha hecho un llamamiento a "luchar, encarnizadamente y sin tregua, contra cualquier sentimiento de desánimo" y ha propuesto "tres miradas diferentes y complementarias" al pasado, al presente y al futuro de Cataluña, en las que aseguró que hay "motivos de esperanza".
En cuanto al futuro, Artur Mas ha remarcado que "nunca como ahora Catalunya había estado tan cerca en su aspiración y su anhelo de plenitud nacional" y el hecho de que cada día más catalanes "se incorporan al sentimiento y al concepto que es a nosotros a quienes nos corresponde decidir libremente nuestro futuro como pueblo y como nación ".
Respecto al pasado, el jefe del Gobierno ha indicado que "a pesar de algunas derrotas, que en algún momento podían parecer definitivas, Cataluña nunca fue ni se comportó como un pueblo vencido". Del presente destacó los ejemplos de personas, colectivos y entidades "que actúan con gran generosidad, con un altísimo sentido del deber y de la responsabilidad, que hacen cosas, que ayudan, que se mueven".