El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, se ha desplazado hasta la Costa del Sol, donde un incendio forestal ha afectado a seis municipios y obligado a evacuar a miles de ciudadanos. Griñán ha visitado el Puesto de Mando Avanzado instalado junto a la AP-7 y el Hospital Comarcal de Marbella, donde ha podido conocer de primera mano los trabajos que los más de 800 efectivos destinados entre personal del Infoca, del 112, de la UME, Guardia Civil, Policía y demás están desarrollando para controlar el fuego.
En este sentido, el presidente andaluz ha subrayado la "excepcional colaboración" entre todas las administraciones, esto es, Gobierno central, Junta, Diputación de Málaga y los seis ayuntamientos afectados, clave para minimizar los efectos del siniestro.
Griñán ha añadido que debe tenerse "plena confianza en los profesionales, porque hay más de 800 efectivos humanos, medios de transporte aéreos y terrestres" que están tratando de minimizar las consecuencias de un incendio muy virulento y que, según ha avanzado el presidente andaluz, "ha podido ser intencionado", extremo que de confirmarse "se trataría de un acto criminal, un acto que no habría palabras para reprocharlo por el enorme daño que hace", ha enfatizado.
El mandatario andaluz, que ha estado rodeado de los consejeros de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, Luis Planas, y de Justicia e Interior, Emilio de Llera, ha expresado su deseo de restablecimiento a los heridos y ha pedido la "cooperación de todo el mundo" para "dar tranquilidad, seguridad y aliento a estas fuerzas que tan bien lo están haciendo a riesgo de sus vidas para sofocar un incendio que lamentablemente puede haber sido provocado".
Asimismo, ha podido trasladar directamente su solidaridad a los vecinos evacuados por el siniestro y ha señalado que aún es pronto para realizar una estimación de los daños producidos, además de destacar la especial complejidad del fuego al tratarse de una zona con una orografía "muy complicada".