Loja (Loja).- Los mecanismos para intentar dañar la imagen de los gobiernos progresistas de Latinoamérica se han identificado en Ecuador, Venezuela, Argentina y ahora en Bolivia, gracias al libro “Wiki Media Leaks”, en donde se expone “la relación entre medios y gobiernos de América Latina bajo el prisma de los cables de Wikileaks” en un trabajo desplegado pordos autores argentinos (Martín Becerra y Sebastián Lacunza.

La obra exhibe cómo los embajadores norteamericanos en La Paz tenían contactos con medios de comunicación y con grandes empresarios, quienes estaban descontentos con el cambio de época que respaldan millones de bolivianos junto a su Presidente Evo Morales.

En su página 152, se pone en evidencia cómo utilizaban discursos similares para intentar dañar la imagen del Jefe de Estado Boliviano. En base a los cables del 27 de noviembre del 2007 se informa que a la hora de enviar textos sobre libertad de expresión, incluyen definiciones como las firmadas por el embajador Philip Goldberg , que decía

“A pesar de que Bolivia todavía tiene una prensa vibrante e independiente, estamos viendo que la libertad de expresión se ha deteriorado bajo la presidencia de Morales”.

El mismo despacho cita un informe de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) de marzo del 2007 que pone de manifiesto que “es innegable que el clima de miedo ha sido instalado después del llamado subpreticio del Presidente a las masas de simpatizantes a amedrentar a los periodistas y a los medios”.

Además, la Agencia de los EE.UU. para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en ingles) y otros organismos internacionales han sido el soporte político y financiero de ciertos medios de comunicación privados y grupos que se oponen a gobiernos como el de Bolivia.

Los cables diplomáticos difundidos por Wikileaks confirman que el Departamento de Estado norteamericano incentivaba campañas mediáticas en contra de Evo Morales.

La información muestra que en mayo de 2006, la delegación diplomática estadounidense en La Paz aseguraba que tres ciudadanos venezolanos fueron contratados por la USAID para que trabajen en Bolivia “sobre democracia”. Más tarde, en noviembre de 2007, el entonces embajador de EE.UU en Bolivia, Philip Goldberg, expresó en otro cable, su desagrado porque el Gobierno boliviano estaba investigando el financiamiento de organismos como la Usaid a ciertos sectores de la prensa de ese país.

Goldberg incluso aseguró que Evo Morales estaba armando un show e informó que el periodista Carlos Valverde, a quien identificó como una de sus fuentes, le había asegurado que el Mandatario boliviano estaba preparando “el terreno para un autogolpe.

Respecto a este tema, el Presidente Rafael Correa habló hoy en Loja y expuso su contrariedad a estas manipulaciones y acuerdos entre propietarios de la prensa mercantil, empresarios y diplomáticos que habitan en América Latina con el propósito de perjudicar a la dignidad de los pueblos.

Finalmente, el Mandatario ecuatoriano dijo que al igual que en Ecuador los medios mercantiles se convirtieron en actores políticos. SAU/El Ciudadano