La actriz defendió el género teatral que, “a pesar del momento que estamos viviendo, IVA para arriba IVA para abajo, sobrevive”.
Santander,.- La actriz Carmen Machi ha asegurado hoy que “la televisión ha hecho mucho bien al teatro”, y ha explicado que aún hoy en día hay gente que va a ver las piezas teatrales en las que participa “esperando encontrarse con Aída”, el personaje al que dio vida en dos series de la pequeña pantalla.
En este sentido, la Premio Max a la Mejor Actriz Protagonista 2009 consideró que es “fantástico” que haya “un porcentaje elevado de público que va al teatro porque sigue el fenómeno televisivo”. “Me rompo a llorar de la alegría”, bromeó Machi, quien agregó que es precisamente esa “empatía brutal” que se tiene hacia Aída la que “atrae nuevos espectadores”.
Así lo señaló la coprotagonista de ‘Pájaros de papel’ en una rueda de prensa en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) con motivo de la obra ‘Juicio a una zorra’ que representará esta noche en el marco del ciclo ‘Escénicas en el CASYC’, y en la que intervino junto al director de la pieza, Miguel del Arco, con quien mostró una gran complicidad a pesar de ser la primera vez que trabajan de forma conjunta.
Del Arco expresó su acuerdo con las palabras de Machi y añadió que el medio televisivo, en el que ha trabajado tanto de guionista como de actor, ha aportado además “muchas herramientas” al teatro y “ha cambiado la forma de interpretar”. Así, comentó que a él, por ejemplo, le sirvió para adquirir “la disciplina de escribir a diario incluso sin estar inspirado”, debido a lo estricto de los tiempos.
La actriz que, aunque ha trabajado en cine y televisión “nunca ha dejado las tablas”, “Viva el teatro, no puede morir”, clamó la presentadora de la XXIII edición de los Premios Goya.
‘Juicio a una zorra’
Entre halagos mutuos, Machi y Del Arco explicaron que la idea de crear ‘Juicio a una zorra’ surgió de un encargo del Festival de Teatro de Mérida, que les propuso redactar un monólogo sobre algún personaje secundario que nunca hubiera tenido “voz propia”. “Lo único que exigí es que la protagonista fuera Carmen Machi”, apuntó el Premio Max al Mejor Director, quien confesó que fue “la primera vez” que escribió una obra “con la cara del personaje en la cabeza”.
“Y a partir de ahí nos casamos”, bromeó el director agarrando la mano a su Helena de Troya, que, en su opinión, además de tener un “registro gigantesco”, posee “un don”, que es el de “convertir en verdad cualquier cosa que pasa por su boca”.
Machi, que está recorriendo toda España representando al mito heleno, dijo estar “muy contenta” de actuar en Santander -de donde es su madre- y confesó que cuando se mete en la piel de este personaje se siente “poseída”. En esta línea, apuntó que aunque “nunca” ha sufrido un dolor similar al del personaje mitológico, que fue violada y culpada por la historia de provocar una guerra, la obra aborda emociones que “todos conocemos”.
“Creo muchísimo en el amor, incluso como una enfermedad”, confesó Machi, quien explicó que a la hora de meterse en Helena no fabrica el dolor, sino que “viene solo”, siente lo que calificó como “algo mágico, una especie de catarsis”. Es tal el sentimiento que le produce este personaje y la “cantidad de energía” que le transmite que cuando termina necesita “abrazarse a alguien”, bien sea el director, la maquilladora o cualquier otro compañero.
En el encuentro con los medios, la Premio Ondas a la Mejor intérprete femenina en ficción nacional reconoció que con lo que más sufre cuando se sube a un escenario es en el momento de los saludos porque es “cuando dejas de ser el personaje para ser tú misma”. Entre risas, su amigo y director añadió que “lo hace fatal, sale un poco encogida”.