WWF España, organización que lleva más de 40 años trabajando activamente por la conservación del lobo ibérico, denuncia la evidente falta de una política de conservación de esta especie basada en un control científico riguroso e independiente. WWF subraya que este hecho ha quedado demostrado tras el reciente anuncio de iniciar, con carácter inmediato, las batidas para controlar la población de lobos en Picos de Europa por parte del Principado de Asturias.

WWF España se ha dirigido hoy por carta al Ministro Arias Cañete para exponerle, una vez más, su preocupación por la enorme descoordinación y diferencia de criterios, incluso entre comunidades autónomas vecinas, a la hora de abordar la conservación del lobo. La organización recuerda que esto está permitiendo que se tomen decisiones sobre la gestión de las poblaciones en función de la presión ejercida por determinados intereses ganaderos y cinegéticos locales.

“Es inaceptable que el último censo nacional del lobo ibérico se realizara hace ya veinticuatro años, en 1988. El resultado es que nadie conoce con certeza el tamaño de la población de lobo en España y la decisiones se toman sin información científica suficiente, lo que representa un enorme peligro para la especie y, en particular, para las poblaciones más pequeñas y, por tanto, susceptibles a las presiones humanas, incluyendo las de Extremadura y Sierra Morena que se consideran virtualmente extintas ante la inoperancia de las Administraciones”, afirmó Juan Carlos del Olmo, Secretario General de WWF España.

En la mayor parte de las comunidades autónomas las decisiones sobre esta especie se toman basándose en trabajos parciales realizados entre 1997 y 2004, mientras que en los últimos años se han primado fundamentalmente las medidas de control de la especie y de compensación por daños. Todo ello en detrimento de una política real de inversión en medidas de prevención para los ganaderos y de apoyo a la promoción de los productos procedentes de los territorios habitados por el lobo.

WWF España ha pedido al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente que, de forma urgente, exija la protección estricta de la especie en Picos de Europa y en todos los parques nacionales, y que ponga en marcha cuanto antes medidas para enfrentar esta situación, haciendo uso de todas las competencias e instrumentos a su alcance.

“En primer lugar, es imprescindible que el Ministerio organice y coordine un nuevo censo nacional del lobo, realizado por especialistas independientes y de reconocido prestigio, que nos permita conocer la situación real de la especie en toda su área de distribución, incluyendo las zonas en las que su situación es más crítica”, añadió Del Olmo.

Además, WWF ha pedido al Ministro que convoque de forma urgente al Grupo Asesor de la Estrategia del Lobo Ibérico para diseñar, junto con el Ministerio, una hoja de ruta para la conservación y gestión de la especie enfocada a disminuir la conflictividad al norte del Duero y a permitir la recuperación de las poblaciones del sur. Igualmente debe crearse con urgencia un grupo de trabajo con representantes de administraciones, ONG, sindicatos agrarios y expertos para unificar y mejorar los sistemas de compensaciones, desarrollar nuevos mecanismos de prevención para minimizar daños a la ganadería y tratar los problemas de la ganadería extensiva.

FOTO: 'CC BY-3.0-ES 2012/EJ-GV/Irekia-Gobierno Vasco/Mikel Arrazola'