“Nos congratulamos de que ahora siga la senda marcada por FORO en política lingüística, si es verdad que va a retomar la oportunidad que desaprovechó en su día el Gobierno de Areces”
Oviedo.- El portavoz de Educación, Cultura y Deporte del Grupo Parlamentario de FORO, Manuel Peña, ha afirmado hoy que la Consejera del área, Ana González, “defiende una postura sobre la enseñanza del asturiano que es contradictoria con la que hasta ahora ha puesto en práctica el PSOE”. Ante el anuncio realizado por González durante la inauguración de la Universidá Asturiana de Branu, de que su departamento regularizará la situación del asturiano y de sus docentes en Primaria y Secundaria, Peña ha manifestado que “nos congratulamos de que ahora siga la senda marcada por FORO en política lingüística, si es verdad que va a retomar la oportunidad que desaprovechó en su día el Gobierno de Areces, y no se trata de un anuncio hecho simplemente por quedar bien en el contexto en que lo realizó”.
El anuncio de la Consejera, en cualquier caso, asegura el diputado de FORO, “presenta todavía muchas incógnitas, tanto en sus aspectos formales, ya que no ha venido acompañado de un calendario de plazos y actuaciones, como en su contenido, porque ¿qué quiere decir exactamente González cuando habla de “regularización” de los profesores de asturiano?”. En este sentido, recuerda que “FORO marcó la hoja de ruta de la regularización del asturiano, política y económicamente factible, y la Consejera debe precisar si se va a dar continuidad a la iniciativa tomada por el Gobierno de FORO -y anunciada en un comunicado de prensa- para crear un especialidad de lengua asturiana y una plantilla docente propia en las enseñanzas no universitarias de acuerdo con lo previsto en el informe encargado por la anterior Dirección General de Política Lingüística a los profesores Leopoldo Tolivar y Míriam Cueto”. Según dicho informe, “no existiría impedimento jurídico insalvable para que el Principado de Asturias, una vez fijada en el currículo para la Educación Primaria y Secundaria, la especialidad de Lengua Asturiana, creara a través de las relaciones de puestos de trabajo del personal docente, puestos destinados a la impartición de lengua asturiana”.
“Si fuera así -de lo que todos nos congratularíamos-, ¿se piensa seguir la solución normativa más ambiciosa por la que había apostado el Gobierno de FORO, esto es, la del pleno reconocimiento de la especialidad mediante la reforma del artículo 2 del Real Decreto 1594/2011, y del Real Decreto 1834/2008 para la Educación Secundaria?”, se pregunta Manuel Peña, que explica que “esta posibilidad conllevaría una negociación con el Ministerio de Educación y, claramente, supondría un cambio respecto a las anteriores políticas del PSOE, que concretamente a finales del 2010, cuando se estaba redactando y tramitando el mencionado Real Decreto 1594/2011, desaprovechó ese momento, con Areces a frente del Principado, para incluir la especialidad del asturiano como Lengua con implantación curricular”. “Entonces se podrían haber incluido en el currículo educativo las lenguas autóctonas que, sin necesidad de ser oficiales, podrían ser reguladas y, por tanto, sus profesores podrían ser funcionarios, y no solamente interinos. Esto dignificaría la asignatura y al profesor. Pero al PSOE nunca le importó esta regularización”.
“Con estos antecedentes, y ante la inconcreción de la Consejera, no cabe otra cosa que acoger con cautela su anuncio e instarla a que concrete en qué va a consistir su política con respecto a la enseñanza del asturiano, ya que caben otras vías “menores”, algunas de las cuales estaban previstas en el dictamen de Tolivar y Cueto, como ofertar las plazas de Lengua Asturiana como plazas docentes de requisitos específicos –en este caso la capacitación de asturiano- en Primaria y vincularse, como un perfil específico, a la especialidad de Lengua Española y Literatura en Secundaria; o la creación de un cuerpo propio de maestros y de profesores de Lengua Asturiana en la Administración del Principado de Asturias. En un tema tan complejo y con tantas vías posibles de aplicar una política lingüística, lo mínimo que debe exigirse a la Consejería es que explique de forma clara qué quiere hacer. Y esto es lo que todavía estamos esperando de Ana González”, concluyó Peña.
