La Presidenta de Argentina habló este martes en el plenario del Mercosur en el Palacio Planalto, de Brasilia, en el cierre de la Declaración Conjunta realizada por todos los mandatarios presentes del grupo, la brasileña Dilma Rousseff; el venezolano Hugo Chávez, y el uruguayo José “Pepe” Mujica.
Cristina afirmó que los países del Mercosur constituyen “la quinta economía mundial”, lo que calificó como “una buena noticia”, pero advirtió que eso “también nos exige crear más temprano que tarde los instrumentos y las instituciones que tornen indestructible e indivisible este nuevo nuevo polo de poder”.
Mencionó que había leído recientemente cables que indicaban que “ha retornado desde la Eruropa en crisis la idea de poner un precio tope a los comodities, a nuestros comodities” como “si ahora el problema fueran los comodities o que pusiéramos en peligro la seguridad alimentaria”.
Desde América del Sur y los países del grupo, que son “los mayores productores alimentarios, les decimos -declaró- que se queden tranquilos, que vamos a proveer a la seguridad alimentaria, porque el mundo no está así por la soja, ni por el trigo, ni por el maíz: está así por la inseguridad financiera que generaron ellos, los países desarrollados, con bonos basura, con derivados financieros”.
“Primero –recordó- querían echarle la culpa a los pobres porque no habían podido pagar las hipotecas, pero ahora cada vez se desnuda más que la crisis ha sido originada en los grandes centros financieros, en los paraísos fiscales, más de 80, donde están más de 400 millones de millones de dólares, muchos fugados de nuestras economías” a través de “la evasión fiscal”.
Insistió Cristina en señalar que “por eso le decimos que se queden tranquilos, que cada vez vamos a producir más y mejores alimentos, que nosotros lo que le reclamamos a ellos es seguridad financiera estabilidad financiera para el mundo, y basta de paraísos fiscales, basta de doble discurso donde nos hablan de que tenemos que preocuparnos de los pobres y siguen amparando a los que fugan países de nuestras divisas”.
Por eso sostuvo que los presidentes del Mercosur “tenemos que crear los instrumentos que preserven esta nueva realidad de poder que hemos construido con gran dificultad , pero que estamos dispuestos a llevarla adelante de modo tal que cuando nosotros no estemos, pues somos meras circunstancias de la historia, estén los hijos de nuestros hijos para cuidar esto”.
Citó a Chávez cuando momentos antes mencionaba la “soledad” de que sufrieron por décadas los pueblos sudamericanos, “una soledad política y cultural de nuestra región”.
“Por eso -continuó- hoy es un día histórico, con el ingreso de Venezuela a este Mercosur tan denostado, el que en muchas de nuestras sociedades se descreía y se apostaba a su fracaso”.
“El fin de la soledad comenzó con la llegada de Lula como presidente del Brasil y continuó con la llegada de Néstor Kirchner” y comenzó el “surgimiento de proyectos nacionales, populares y democráticos”, afirmó.
Destacó que los presidentes allí presentes “nunca hemos trabajado para que los ricos sean más ricos” sino para que “la distribución de la riqueza sea cada vez más justa, más igualitaria y más equitativa”.
“Tenemos el desafío –advirtió- de seguir dando todos los días esta batalla cultural” en la cual “no estamos solos, sino que representamos a esa fuerza social, esa fuerza histórica de nuestros pueblos que se juntan en estos 200 años de historia para acabar por fin con esa soledad”
