El Ejecutivo de FORO ASTURIAS afloró en 2011 el agujero de 230 millones de euros de los ‘gastos ocultos’ de Areces, asumiendo su coste, y por eso se reduce ahora el déficit en el primer semestre

• “Cuando nuestro Gobierno proponía la Ley de Endeudamiento hace seis meses, no teníamos que financiarnos, como ahora, con la prima a más de 600 puntos básicos”
• “El que amenazó al Ejecutivo de FORO en Asturias, Montoro, acaba siendo el interventor intervenido por Europa, como era de prever”

Oviedo.- El Vicepresidente de la Junta General del Principado, Pelayo Roces, ha afirmado hoy que “Asturias no necesita pedir el rescate, como otras comunidades autónomas, gracias a la gestión del Gobierno de FORO”, y recordó que “cuando el Gobierno de FORO ASTURIAS se hizo cargo de las cuentas del Principado se encontró con facturas de supuesto gasto desplazado sanitario, por valor de 230 millones de euros, que tuvo que contabilizar adecuadamente, además de la carga sobre la deuda de las cuentas de la Junta de Saneamiento que el Gobierno socialista mantenía sin consolidar, y además afloró la imposible ejecución de  ingresos previstos. Lejos de recurrir al maquillaje, apostamos por sanear agujeros y asumir la falta de recursos para gobernar con el ajuste como norma”.

“El esfuerzo no fue baldío, y la actuación decidida de nuestro Gobierno, combinando el ajuste con el rigor presupuestario, consiguió dar sus frutos, que recoge ahora el nuevo Ejecutivo socialista, que por el momento está consiguiendo eludir el acceso a los nuevos mecanismos de financiación de la deuda pública de las Comunidades Autónomas que impulsa el Estado, a pesar del elevado déficit público que aún persiste, el real y el maquillado en el sector público, heredado de la despilfarradora gestión de Vicente Álvarez Areces”, explicó el parlamentario de FORO.

Según Roces, “FORO ASTURIAS hizo de la transparencia contable su bandera, a pesar de que la Junta General del Principado denegó sistemáticamente las peticiones de comparecencia de nuestro Consejero de Hacienda y Sector Público, Ramón del Riego, para informar del enorme agujero que se encontró nuestro Gobierno, que en términos de contabilidad nacional ascendía a 845 millones de euros”.

El recorte de gasto corriente, y la aplicación de la ortodoxia contable para desmantelar las “ingenierías financieras” de las “facturas ocultas en los cajones” de Areces, comenzaron a dar sus frutos en el primer y segundo trimestre de este año 2012, después de haber llegado al 3,64% de déficit en el año 2011, con una desviación del 2,34% sobre el límite oficial, al haber aflorado el agujero de Areces.

“Sin embargo –prosiguió Roces–, aunque la situación de Asturias no sea comparable con la de Valencia y otras comunidades autónomas, afronta grandes dificultades adicionales, que nuestro Gobierno intentó ajustar, especialmente en su sector público. La Fundación Niemeyer y la Radio Televisión del Principado de Asturias son una pequeña muestra de esa administración paralela, en la que se nos impidió actuar, a la que el nuevo Gobierno se tiene que enfrentar ahora, con entidades cargadas de deuda oculta que deberá ser aflorada y ajustada sin más dilaciones”.

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, “que acabó siendo el interventor intervenido por Europa, como era de prever”, que decidió actuar políticamente en Asturias y amenazó a nuestra comunidad, “se enfrenta ahora a la realidad de las comunidades autónomas españolas, y carece de margen para frivolidades como la que se permitió en el Principado, en donde hemos perdido un tiempo precioso con la negativa del PSOE y el PP a tramitar el endeudamiento de nuestra comunidad, en tiempos en los que las negociaciones con los bancos eran llevaderas”, aseguró el Vicepresidente de la Junta General.

“Asturias tiene ahora que renovar buena parte de su endeudamiento, y debe acometer el pago de las obligaciones contraídas por los contratos plurianuales del Gobierno de Areces, que han ido generando nuevas obligaciones económicas que tenemos que enfrentar sin más dilación, con el pago a los proveedores y contratistas de las facturas y las certificaciones pendientes. Hasta los más lerdos entenderán ahora la insistencia de nuestro Gobierno en lo importante que era endeudarse cuando lo proponíamos, pues desde entonces hasta ahora el coste de nuestra financiación se ha disparado a niveles de rescate. Cuando nuestro Gobierno proponía la Ley de Endeudamiento, hace seis meses, no teníamos que financiarnos, como ahora, con la prima a más de 600 puntos básicos. La irresponsabilidad política se paga muy cara”, concluyó Roces.