Reproducimos la intervención del presidente del Principado, Javier Fernández, en el acto de toma de posesión de los vocales del Consejo Consultivo.
"Muchas gracias por su asistencia. Muchas gracias, especialmente, a Luisa Fernanda del Valle y Pilar Jiménez, quienes finalizáis vuestra etapa en el Consejo Consultivo, donde habéis invertido vuestro trabajo y vuestro talento durante estos años. Ése es, precisamente, el testigo y el desafío que recogen hoy quienes continúan y quienes se incorporan a esta institución: el empeño ilimitado del talento.
Por vuestra formación y conocimientos, no explicaré en qué consiste el Consejo Consultivo. Tampoco diré cuál es vuestra función, las tareas que detallan el Estatuto de Autonomía y la ley que os regula. Sería un desmesurado ejercicio de osadía y soberbia por mi parte recordaros cuáles son vuestras labores, y el adecuado funcionamiento de las instituciones pasa, entre otras cosas, por que cada uno reconozca sus límites, sin vocación expansiva alguna. Vuestra independencia es una garantía que a todos nos conviene. Entenderéis que no aludo en exclusiva a quienes integráis el Consultivo; sino también a quienes representáis otras instituciones, como la Sindicatura de Cuentas y la Procuradoría General. Os ruego que nos ayudéis a preservarla.
Durante estos siete años, habéis trabajado y habéis trabajado bien. Es un reconocimiento merecido, y quiero hacerlo público. Vuestros dictámenes y manifiesto hoy lo que siempre percibí, pese a ser lego en tantas cuestiones: vuestros dictámenes avalan un trabajo bien hecho, anudado en razón y fundamento; vuestro criterio merece aprecio y confianza. Consultaros no es un trámite más; bien al contrario, pediros opinión es una conveniente cautela, una garantía. Mi gobierno os consultará preceptiva, voluntaria y, llegado el caso, ávidamente.
Vosotros sabéis que las instituciones maduran en tiempos casi geológicos, que requieren un poso lento, que forme estrato. A veces, nos damos tanta prisa en el avance como urgencia en la retirada, y entre idas y venidas no hemos dado tiempo al adecuado arraigo de lo que pusimos en marcha. Tal parece que los motivos que un día se invocaron hubieran caducado de repente, se quedaran inservibles, fuesen irresponsables alegrías de tiempos boyantes. No caigamos en esa confusión, tan simple. No confundamos necesidad con juicio, porque las razones que hubo para desarrollar la arquitectura institucional de esta comunidad autónoma continúan siendo plenamente válidas. No confundamos, repito, la necesidad con la argumentación.
Hoy podéis ver hasta qué punto se cuestiona el Estado autonómico, y con argumentos que a primera vista, para ojos y oídos desentrenados y poco avisados, pueden parecer apabullantes. Hay instituciones duplicadas, dicen. También señalan con escándalo que las comunidades autónomas tienen parlamentos, gobiernos, administración propia. A los Ejecutivos autonómicos los visten de manirrotos y despilfarradores. Y el Gobierno central, al mismo tiempo que pide y obtiene para toda España más flexibilidad en el objetivo de déficit, exige a los gobiernos autonómicos otra vuelta de tuerca. Todas estas supuestas razones ensamblan perfectamente en un único discurso: la deslegitimación apresurada e interesada del Estado autonómico. De todo esto, os anuncio, tendremos más tiempo para hablar en los días que nos esperan. No quiero entreteneros más. Reitero mi agradecimiento a quienes dejáis el Consejo y mi enhorabuena a quienes os incorporáis."
foto: De izquierda a derecha, los vocales del Consejo Consultivo Rosa Zapico, José María García, Juan Luis Rodríguez Vigil, Fernando Fernández Noval, Bernardo Fernández y el presidente del Principado, Javier Fernández.
