San Cucao.- La directora de la Fundación Príncipe de Asturias fue hoy pregonera de excepción de la fiesta del Bonito del Norte de Casa Carlos, en Lanera, ante más de doscientas personas encabezadas por los alcaldes de Siero y Noreña y entre las que había expertos gastrónomos y escritores de gastronomía. De excepción, porque como señaló en su presentación Gustavo Izquierdo, promotor y anfitrión de estas jornadas, es la segunda vez que una mujer pregona las mismas, siendo la primera que lo hizo la cronista oficial de Oviedo.
INTRODUCCIÓN DE GUSTAVO IZQUIERDO;
De las 23 Fiestas Gastronómicas que llevamos, solamente hemos tenido a una mujer pregonera, que fue Carmen Ruiz-Tilve , en la primera Fiesta Gastronómica. Han tenido que pasar 21 pregoneros hasta que por fin hemos conseguido convencer a otra pregonera.
En estos tiempos en que está de moda hablar de “paridad”, una cosa es predicar y otra dar trigo, ya que es muy difícil conseguir la “paridad”, al menos en este campo, prometo dedicar mas esfuerzo a buscar el equilibrio, aunque ello no va a ser fácil.
Contamos en esta ocasión con una Asturiana de Castropol, nacida en Madrid, que ha conseguido en muy poco tiempo el cariño, el aprecio, la estima y el reconocimiento profesional de todos los asturianos, por su trabajo como Directora de la Fundación Príncipe de Asturias, desde Diciembre de 2009.
Teresa Sanjurjo González. Estudió en la Universidad Pontificia Comillas (ICADE), donde obtuvo en 1995 la Licenciatura en Derecho y la titulación de Letrado Asesor de Empresas. Tras otros estudios jurídicos y de gestión, en 1999/2000 cursó el master en Administración y Dirección de Fundaciones y otras Entidades no Lucrativas por la Universidad Autónoma de Madrid. En el año 2007 cursó el Programa de Dirección General del Instituto de Estudios Superiores de la Empresa (IESE).
En 2001 fue nombrada directora técnica de la Confederación Española de Fundaciones, actuando al mismo tiempo como profesora tanto en el master en Administración y Dirección de Fundaciones y otras Entidades no Lucrativas como en otros cursos y seminarios especializados del sector.
En el año 2003 se produjo la fusión de la Confederación Española de Fundaciones con el Centro de Fundaciones, fruto de la cual nació la Asociación Española de Fundaciones, organización de la que ha sido directora general.
Es miembro del Club de la Haya, del Patronato de la Fundación Derecho y Discapacidad, de la Junta Directiva de la Asociación Española de Directivos y miembro del Consejo de Redacción del Anuario de Derecho de Fundación
INTERVENCIÓN TERESA SANJURJO, DIRECTORA DE LA FUNDACIÓN PRÍNCIPE DE ASTURIAS, EN LA FIESTA GASTRONÓMICA DEL BONITO DEL NORTE
(Restaurante Casa Carlos, San Cucao de Llanera, 12 de julio de 2012)
Como bien sabía don Quijote, el trabajo y el peso de las armas no se pueden llevar sin el gobierno de las tripas. En este quehacer diario nuestro tan acelerado, tan falto demasiadas veces de serenidad, el acto de sentarse a la mesa para comer se convierte, a menudo, en una ocasión única e irrepetible en la que renovamos placeres ancestrales. Así sucede cuando, como hoy, nos sentamos para probar el maravilloso bonito y cuando lo hacemos con buen humor, con ganas de disfrutar y con alegría.
Agradezco muy sinceramente a Gustavo, también conocido por mi hijo como El rey Baltasar tras las intensas conversaciones telefónicas que tuvieron la pasada Navidad, esta oportunidad que me brinda de formar parte de esta fiesta del bonito. Lo agradezco además de forma muy especial porque estos últimos días he hecho un ejercicio de memoria para recordar los veranos de mi infancia, que estaban llenos de tantas cosas maravillosas –tres meses de vacaciones, sol, amigos, playa, Asturias−, todas asociadas al aroma y al sabor de la buena cocina. Quién no recuerda con cariño lo que cocinaba la abuela: la carne asada, el pote, las croquetas, las galletas con la nata de la leche que traían cada mañana a casa… Y, claro está, el bonito. Aquel riquísimo bonito encebollado, o en empanada, o con tomate, al que yo me enfrentaba con decisión y como si no hubiera comido nada nunca en mi vida…
Lo que no sabía entonces es que el bonito pertenece a la familia de los Escómbridos, orden Perciformes. Es imprescindible diferenciar entre el bonito del sur (Sarda Sarda) también llamado bonito común o del Atlántico y el bonito del norte (Thunnus Alalunga), denominado atún blanco y perteneciente a la familia de los túnidos. Sólo es bonito del norte el que sobrepasa los 4 kilos de peso y se captura en nuestro mar Cantábrico con anzuelo para que el pez no sufra y ofrezca una mayor calidad de su carne. El bonito, como todos aquí sabéis, se diferencia principalmente por la longitud de la aleta pectoral, que es bastante más larga, así como por las rayas oblicuas de color oscuro que presenta a ambos lados de la zona dorsal.
Hoy celebramos pues la fiesta gastronómica del Thunnus Alalunga. Estamos entre amigos y dispuestos a disfrutar juntos y sentirnos felices.
Aunque sea solo por unas horas, es importante encontrar ocasiones para celebrar, para encontrarnos con el otro, reír y compartir. La mayor parte de nuestras preocupaciones están centradas en la crisis. Estamos, por ello, agobiados y también expectantes, esperando ver la luz al final del túnel. Todos sabemos que, como en otras circunstancias adversas, la solidaridad y la unión nos acercarán a la solución. Y estamos haciendo grandes esfuerzos para ello. Lo saben bien los empresarios de la hostelería y lo saben bien los pescadores. Siempre han luchado y se han enfrentado al futuro con ilusión, con ganas, con tesón. Y ahora lo hacen con más energía aún, si cabe, en medio de un panorama tan difícil.
Los que esperan durante meses la llegada de la costera del bonito están trabajando duro por conservar y proteger su medio de vida. La Federación de Cofradías, los patrones, los marineros, sus familias, los hosteleros y restauradores están trabajando con espíritu de colaboración, sin desmayo, y eso es digno de reconocimiento.
De ese trabajo disfrutamos todos, comiendo bonito, uno de los pescados azules más exquisitos. Cuando consumimos bonito del Norte estamos tomando un alimento saludable y sano, rico tanto en proteínas como en vitaminas A, B, D, y K. Aporta minerales como el calcio y el yodo, esenciales para el metabolismo. Destacan sus altas propiedades nutritivas, ya que es rico en ácido linoleico y en Omega 3, ambos ácidos polinsaturados esenciales en la prevención de enfermedades cardiovasculares y muy útiles para reducir el nivel de colesterol.
De gran versatilidad en la cocina, para asumir todo su potencial culinario, me permito citar a Pepe Iglesias, que nos contó que en la antigua Grecia, donde los cocineros eran considerados como sabios, y se situaban en el mismo rango social que los filósofos, matemáticos, científicos o arquitectos, la máxima prueba de reconocimiento profesional, consistía precisamente en asar un bonito entero, sin más ayuda que la del fuego y unas hojas de parra.
Había siete cocineros míticos: Apctonete, Aristión, Chariades, Egis, Eutimios, Lambrias y Nereo, al igual que siete sabios, y cada uno tenía su especialidad, siendo Egis de Rodas el que cocinaba en el grado de perfección el pescado, y el manejo de las hierbas aromáticas para ello.
Y después de citar a los clásicos no nos queda más que brindar: brindemos juntos por este día de encuentro y fiesta, por ese futuro que os deseo próspero y lleno de éxito. Brindemos por la amistad y la esperanza y demos gracias a los cielos, a los mares y a la tierra por todas estas bendiciones que nos hacen la vida un poco más alegre, un poco mejor.