El Área de Juventud de Izquierda Unida quiere denunciar de forma contundente y pública la brutal escalada represiva que ayer desembocó  en cargas policiales y lanzamiento de botes de gas lacrimógeno durante el final de la manifestación en defensa de la minería que discurrió por las calles de Madrid.
Desde hace varias semanas estamos alertando del nivel de represión de las fuerzas de seguridad del Estado, que esta aumentado de manera exponencial día a día, provocando conflictos con los mineros y la sociedad civil que apoya sus reivindicaciones.
La acción de las fuerzas policiales   deja tras de sí 76 heridos y 7 detenidos, en lo que   una manifestación pacífica que fue reventada por la orden policial de buscar confrontación.
Entre los heridos se encuentran varios militantes de Izquierda Unida, entre ellos algunos jóvenes que acompañaban a los mineros en su marcha pacífica en defensa de sus empleos. También hay una menor que ha recibido un pelotazo de goma por el que ha tenido que ser atendida de urgencia.
David Leis, el coordinador regional de juventud, reitera “el apoyo de su organización a la causa de los mineros porque es la causa de todos los trabajadores” y advierte del peligro que puede suponer “la estrategia desarrollada por el gobierno, que quiere  silenciar la protesta de los empobrecidos por el capital a base de golpes”.
Beatriz García Serrano, joven secretaria de organización de IU Carreño, afirma que “la carga policial   constituye una brutal agresión para acabar con una manifestación pacífica y justa”.
Los jóvenes de IU  piden  “el cese inmediato de las actitudes represivas por parte de las fuerzas policiales, la apertura de una comisión parlamentaria contra la represión y por las libertades constitucionales y la dimisión inmediata del Ministro del Interior y de los Delegados de Gobierno de la Comunidad de Madrid, León y Asturias” y confían en que “el ejemplo de la lucha minera se extienda a otros sectores”.

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