JPA/DICYT Marina Gordaliza Escobar, catedrática de la Universidad de Salamanca y miembro del Instituto de Estudios de la Ciencia y la Tecnología (eCyT), es la primera persona elegida para ingresar en la Academia de Farmacia de Castilla y León. Hasta ahora, esta institución nacida hace poco más de dos años estaba integrada únicamente por sus miembros constituyentes. En el acto celebrado esta tarde en el Paraninfo de la Universidad de Salamanca, la profesora de la Facultad de Farmacia ha disertado en su discurso de ingreso sobre el diseño de nuevos fármacos.

En declaraciones previas a DiCYT, ha explicado que la intención de su conferencia es mostrar distintos abordajes de la Ciencia a la hora de encontrar remedios para las enfermedades y ha destacado que una de las principales fuentes para encontrar compuestos serán los océanos. “El mar representa el 70% de la superficie de la Tierra y supone el 95% de la biosfera”, en referencia al conjunto de seres vivos del planeta. Sin embargo, de cara a la obtención de medicinas es un territorio aún por explorar.

A pesar de que hay 30.000 productos marinos que han quedado registrados en publicaciones científicas, sólo el 2% de ellos derivan de organismos de aguas profundas, según recoge en su discurso la nueva académica de número. La tecnología de exploración actual y futuro hace prever que pronto el ser humano podrá conocer y aprovechar mejor esos recursos, teniendo en cuenta que “el 60% de los compuestos que se aíslan tienen actividad biológica significativa”. Además, es de esperar que los organismos que sobreviven en los fondos marinos, al tener que hacer frente a unas condiciones muy adversas, produzcan numerosos metabolitos para defenderse que los científicos podrían aprovechar para la generación de fármacos.

No obstante, a partir de esta perspectiva, Marina Gordaliza ha querido reflexionar sobre el proceso complejo que supone desarrollar un fármaco después de aislar un compuesto. La investigación supone enormes costes y esto se traduce en que los medicamentos son caros y el 80% de la población mundial no dispone de los fármacos que necesita. Por eso, la profesora ha apuntado a la necesidad de un “compromiso con la Humanidad” que permita desarrollar proyectos para abaratar los costes. De cualquier forma, “a pesar de que el coste de desarrollar un fármaco sea muy alto, los beneficios siempre superan a los gastos”, destaca.

La nueva académica asegura que para ella “es un honor” ser la primera experta elegida por sus compañeros para ingresar en la Academia de Farmacia de Castilla y León y ha recordado la función de asesoría que tiene este tipo de instituciones para el conjunto de los científicos. Asimismo ha valorado especialmente que José María Medina, también profesor de la Universidad de Salamanca, haya sido el académico que ofrece el discurso de contestación, en el que ha valorado los méritos de Marina Gordaliza para un lugar en la institución.

FOTO: Marina Gordaliza, en el centro, con los demás académicos.