IRNA - El nuevo Presidente de Egipto, Mohammed Morsi anunció su intención de reforzar las relaciones diplomáticas con Irán, para crear un "equilibrio de presión en la región".
El candidato elegido de los Hermanos Musulmanes afirmó, unas horas antes de la publicación de los resultados de las elecciones presidenciales, que la mejora de las relaciones con Teherán "permitirá crear un equilibrio de presión en la región. Y ello formará parte de mi programa".
Por su lado, el presidente de Jefe de Irán, Mahmud Ahmadineyad felicitó al pueblo egipcio por haber elegido a Mohammed Morsi como Presidente.
Teherán ve en esa victoria una de las últimas etapas del "Despertar Islámico".
Seguido de cerca desde la franja de Gaza hasta el Golfo Pérsico, la victoria de Mohammed Morsi ha sido interpretada como un evento histórico, cuyas consecuencias abarcan más allá de las fronteras del propio Egipto.
En la franja de Gaza, muchos Palestinos esperan que Morsi ponga fin a la cooperación de El Cairo con el bloqueo del régimen israelí al territorio costero.
En el conjunto de los países árabes del Golfo Pérsico, las reacciones han sido prudentes. En los Emiratos Árabes Unidos, la Agencia de noticias WAM señaló que el gobierno emiratí respetaba "la elección de los egipcios en el contexto de su marcha hacia la democracia".