A partir de 2015, todos los coches nuevos vendidos en la Unión Europea deberían ser capaces de llamar al número europeo de emergencia en caso de accidente, como se explica en un informe aprobado el pasado 19 de junio conjuntamente por las comisiones de Transporte y de Mercado Interior de la Eurocámara.

El dispositivo realizaría una llamada de emergencia al 112 tan pronto como los sensores del coche, como por ejemplo los del airbag, detecten un accidente. También podría activarse manualmente la alerta presionando un botón. El sistema transmitiría automáticamente los datos de ubicación y hora del accidente al centro de emergencias más cercano.

En caso de aprobarse, los operadores de telefonía de los Estados miembros tendrán que actualizar su infraestructura de forma que eCall funcione correctamente.

En la actualidad, sólo el 0,7 por ciento del total de vehículos de la Unión Europea está equipado con sistemas automáticos de emergencia. La instalación del servicio eCall costaría cerca de 100 euros por coche y podría llegar a salvar hasta 2.500 vidas al año en la Unión Europea

FOTO: El servicio eCall podría evitar 2.500 muertes anuales en la UE