CICR.-Desde comienzos de mayo, la situación se ha ido deteriorando en varios lugares de Siria. Continúan los enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y los grupos de oposición armada en Idlib, en las áreas rurales de esta provincia, en Damasco Rural, Hama, Latakia y, en menor medida, en las áreas rurales de Alepo y en Dar’a y Deir Ezor. Los civiles siguen huyendo y las necesidades aumentan.
Ha habido docenas de víctimas en Hula, Al Qubeir y Al Hifa, y cada día hay muertos en otras zonas afectadas por los enfrentamientos. "Lo único que me queda es la ropa que llevo puesta", dijo Um Mahmoud, una viuda de 52 años que huyó sola de Mazrat Al Qubeir, en la provincia de Hama. "Yo misma no tengo de que preocuparme, pero no puedo evitar pensar en lo que sentirán mis vecinos que también huyeron pero no con todos sus familiares" añadió. Miles de personas han huido desde mayo, y muchas siguen huyendo en busca de seguridad, lo que a veces se consigue a una distancia de solo un kilómetro del vecindario donde viven.
"Cada vez más gente necesita ayuda", dijo el jefe adjunto de la delegación del CICR en Siria, Alexandre Equey. "Los habitantes de algunas zonas no puede salir, ni la ayuda puede entrar en éstas. Junto con la Media Luna Roja Árabe Siria, ya hemos podido prestar asistencia a miles de personas, pero tenemos que seguir ayudándolas; al mismo tiempo, tenemos que ayudar a nuevos desplazados."
Sólo la semana pasada, el CICR y la Media Luna Roja Árabe Siria tenían varios equipos en Alepo, en las zonas rurales de la provincia de Idlib y en la capital homónima, así como en Al Nabak, localidad ubicada a unos 80 kilómetros al noreste de Damasco. La Media Luna Roja Árabe Siria continúa atendiendo a las necesidades en varias provincias simultáneamente, mientras que el CICR sigue constituyendo reservas de alimentos, colchones, mantas y suministros médicos y de otro tipo en las secciones de la Media Luna Roja Árabe Siria, en todo el país. Estas reservas permiten a las organizaciones responder rápidamente a las necesidades urgentes, lo que es muy importante si se tiene en cuenta el aumento de la violencia.
"A pesar de que ya hemos ayudado a miles de personas y seguimos desplegando esfuerzos, no podremos estar en todas partes al mismo tiempo”, dijo el señor Equey. "Está claro que las personas necesitan, ante todo, sentirse en seguridad y saber que recibirán la atención que necesitan".
El CICR y la Media Luna Roja Árabe Siria siguen haciendo lo posible por ayudar en el menor tiempo posible a decenas de miles de personas en zonas afectadas por los enfrentamientos.
FOTO: © SARC / I. Malla / sy-e-00101
