El académico, ensayista, novelista y presidente del Seminario de Cultura Mexicana, fallecido la noche del jueves 7 de junio, fue velado por amigos y familiares
Sus restos fueron trasladados al crematorio de Palo Alto, en Cuajimalpa
México D.F.-En un ultimo adiós al escritor, académico e investigador, Arturo Azuela, amigos, familiares y compañeros de rutas culturales, le dieron el ultimo adiós en la agencia funeraria de Avenida Revolución donde fueron velados sus restos.
Al escritor, fallecido a las 21 horas del jueves 7 de junio de una insuficiencia respiratoria, le sobreviven sus hijos Tamara y Rodrigo Azuela.
Jaime Labastida, presidente de la Academia Mexicana de la Lengua, afirmó que Arturo Azuela fue uno de los miembros más queridos y respetados de la institución.
“Fuimos amigos por mas de cinco décadas desde que estudiábamos en la Universidad, fue un gran narrador y novelista, pero ante todo un gran exponente de la claridad en nuestras letras y de los alcances que puede tener un escritor en sus diversas vertientes”.
El arqueólogo Eduardo Matos Moctezuma dijo en el velatorio que Arturo Azuela fue una figura trascendente de la cultura mexicana, ocupándose a través de su obra de temas históricos, así como de análisis de la realidad social de México y Latinoamérica.
“Es una gran pérdida para la cultura mexicana, sin duda un hombre que dedicó todo su empeño a hacer más grande nuestro acercamiento con las letras y con todas las manifestaciones del arte”.
Adolfo Castañón expresó que Arturo Azuela fue la representación de la tradición literaria a través de su amplia obra y de su persona, siempre partícipe en la difusión de la cultura de nuestro país.
“Alternadas con ediciones críticas, antologías, historia de la ciencia, textos de ensayos literarios, nace luminosa y sorprendente su literatura de imaginación, un rubro que me leí completo, comenzando por El tamaño del infierno, Un tal José Salomé, Manifestación de silencios, La cama de las mil vírgenes, El don de la palabra, El matemático y la Mar de utopías, todos ellos textos de gran calidad, estupendos y adictivos”.
Carlos Prieto destacó que tuvo la suerte de ser amigo de Arturo Azuela durante muchos años, iniciando su amistad cuando era director del Fondo de Cultura Económica en Madrid.
“En ese espacio tan importante organizó la presentación de diversos libros míos, al igual que una serie de conciertos, siempre admiré muchísimo su talento tan polifacético y su permanente vigor en la difusión de la cultura”.
Posterior al velatorio, el cuerpo de Arturo Azuela fue trasladado aproximadamente a las 16:00 horas al crematorio de Palo Alto, ubicado en Cuajimalpa, donde familiares y amigos personales los despidieron con flores y aplausos.
Rodrigo Azuela, hijo del escritor, confirmó que en días posteriores se realizará una procesión simbólica con las cenizas de su padre por algunas calles del barrio de Santa María la Rivera donde vivió gran parte de su vida.