La Primera Mandataria habló durante un acto en el que el nuevo directorio de YPF, encabezado por Miguel Galuccio, presentó el plan estratégico para la compañía petrolera, en el hotel Park Tower (Sheraton), acompañada por casi todos los miembros de su gabinete.
“Uno de los grandes desafíos que tenemos nosotros como Estado –dijo- será, a través de políticas públicas activas” será “mejorar el sistema energético argentino” y alcanzar el objetivo de “una YPF que empiece en el pozo y termine en el enchufe de la casa de los consumidores, un desafío que no podemos esquivar”.
Destacó que se resolvió adoptar el sistema de declaración de interés público y sujeto de expropiación del 51 por ciento de las acciones de la compañía porque era la forma “más conveniente” de hacerlo.
“Hubiera sido más fácil estatizar o nacionalizar el cien por ciento y no estar bajo los controles” de la Comisión Nacional de Valores, la Bolsa nacional e incluso la de Nueva York, puntualizó, pero indicó que la recuperación de la mitad más uno de las acciones es la modalidad que “estamos proponiéndole hoy al mercado”.
“Nosotros no actuamos como algunos creen, dogmáticamente o con un manual: actuamos frente a cada circunstancia, y vamos adoptando las medidas que sean más convenientes para la situación que debemos afrontar”, precisó.
Sostuvo la Presidenta que “es necesario entender que todas las decisiones que se toman en el Gobierno es para preservarlo de lo que hemos logrado en estos nueve años” con “estos resultados”.
Indicó que respecto de Aerolíneas Argentinas sí hubo que expropiar el cien por ciento de la compañía porque sus operadores “no dejaron nada” y hoy son juzgados por la Justicia de España, su país de origen.
Señaló que la resolución adoptada sobre YPF responde a la necesidad de que exista un “acople” entre “los intereses de las empresas y los intereses de los países”.
“Por eso –añadió- estamos en contra de todo pensamiento único”.
Subrayó que para constituir el directorio se basó en el “profesionalismo” de sus integrantes, y en sus curriculums, y puntualizó que incluso ella no conoce personalmente a muchos de los miembros.
Puntualizó que el plan estratégico para YPF trazado por Galuccio es “no solamente para los trabajadores, de quienes necesitamos el mayor grado de productividad”, sino también para los contratistas, a quienes “vamos a exigir eficiencia, tecnología, rentabilidad adecuada”.
“Tenemos –continuó- el compromiso con la industria que podemos desarrollar, que no tiene techo” porque puede aplicarse “a toda la provisión de elementos y maquinarias para la explotación de los no convencionales, y constituirnos también en líderes en materia de generar industria vinculada al petróleo”.
“Este –puntualizó- es el gran desafío que tienen los industriales argentinos, ayudados por la capacidad humana en materia de ciencia y tecnología”.
También ratificó que el propósito es que YPF se “asocie” a otras empresas para que todos logren rentabilidad “one to one”.
La Presidenta afirmó estar “muy segura de las decisiones que hemos tomado y en la que nos acompañó el Parlamento y la oposición, a la que vuelvo a agradecer por permitir la recuperación de YPF” y se comprometió a hacer “todo lo necesario para que esta gestión sea exitosa, porque nos lo merecemos los 40 millones de argentinos y se lo merecen hombres como el General Mosconi, que se han comprometido” con la empresa nacional desde su creación.