Asturias.- Las asociaciones patronales del transporte en Asturias, Car, Astra, Asvipmet, Cesintra y Asetra, denuncian conjuntamente la violencia, extorsión y sabotajes de los que han sido objeto, los transportistas, autónomos y conductores que han optado por su derecho al trabajo durante la segunda jornada de huelga indefinida en Asturias.

Desde primeras horas de la mañana, los insultos, amenazas y extorsiones han sido constantes en la mayoría de los polígonos industriales del centro de la región, así como en las inmediaciones de El Musel.

No obstante, y en lo que a transporte de mercancías se refiere, el seguimiento de la huelga, ha sido prácticamente inexistente, siempre que no ha mediado violencia por medio y la mayoría de las empresas cargadoras han podido transportar sus productos dentro y fuera de la región.

Lo mismo puede decirse, prácticamente de los más de 1.500 transportistas autónomos, que ajenos al conflicto, han desarrollado su actividad diaria con normalidad, siempre que les ha sido permitido por la acción de los piquetes, denominados, informativos.

Por lo que se refiere al transporte de pasajeros, durante toda la jornada se han producido daños en multitud de vehículos, la cifra de autocares siniestrados supera el centenar y, en estos momentos, a muchas empresas les está resultando muy difícil cumplir con su actividad, ante la ausencia de vehículos en condiciones óptimas de trabajo.

Las patronales asturianas han trasladado en todo momento, su preocupación ante la Delegación del Gobierno de Asturias, denunciando la injerencia en los “piquetes informativos” de personas que nada tienen que ver con el sector transporte, así como la violencia ejercida, daños en ruedas y lunas de camiones y autobuses, a la vez que solicitaron numerosos servicios de convoyes para protección de las cargas y las personas.

Las patronales de transporte de Asturias reiteran su confianza en la responsabilidad de las partes implicadas en este conflicto, manifestando su intención de volver a las mesas de negociación, en tanto en cuanto, sea desconvocada esta huelga, que no aporta absolutamente nada al proceso negociador, más allá de una tensión totalmente indeseable.