Parlamento Europeo.-Más de dos años después del terremoto en Haití casi medio millón de personas siguen viviendo en campamentos en condiciones deplorables. Según un estudio debatido el martes por la subcomisión de Derechos Humanos y la comisión de Desarrollo del Parlamento Europeo, ejemplos como este dejan claro que aún queda mucho por hacer para proteger los derechos humanos tras un desastre natural.
La eurodiputada popular francesa Michèle Striffler, vicepresidenta de la comisión parlamentaria de Desarrollo, dijo que la experiencia demuestra que tras un desastre natual sobreviene con frecuencia una crisis humanitaria en la que los derechos humanos están en peligro. "Y tengo la impresión de que la situación no mejora con el tiempo", lamentó.
Del mismo modo, Striffler explicó que "en los campamentos establecidos después de los terremotos no suele haber seguridad". La eurodiputada propuso aprender de los errores del pasado, unos errores que "esperemos que no vuelvan a repetirse, especialmente los que implican a mujeres y niños".
"Condiciones inhumanas"
Por su parte, el director ejecutivo de la Red Nacional de Defensa de los Derechos Humanos (RNDDH), Pierre Esperance, dijo que "no se puede hablar de Haití sin tener en cuenta las 420.000 personas que viven en 595 campamentos", que "están viviendo en condiciones inhumanas", comentó.
"Habitan en campamentos sucios y ubicados en zonas pantanosas infectadas y con basura", dijo el director ejecutivo de RNDDH, organización dedicada al respeto de los derechos humanos en Haití, agregando que "se están pisoteando a los derechos civiles, políticos, sociales y económicos". "La cuestión de los derechos humanos no se tiene en cuenta en la reconstrucción de un país", apuntó.
Nueva dimensión de los desastres naturales
El autor del estudio, el profesor Horst Fischer, presidente del Centro Interuniversitario Europeo de Derechos Humanos y Democratización (EIUC) explicó que "el mundo actual se enfrenta a una nueva dimensión de desastres, como es el caso del derrame de petróleo en alta mar, y que estos problemas tienen efectos a largo plazo para el medio ambiente y para los propios ciudadanos".
Por su parte, un representante de la unidad dedicada a la ayuda humanitaria y protección civil de la Comisión Europea dijo que se están desarrollando directrices "específicas para proteger a los ciudadanos especialmente vulnerables", e incluyendo "cuestiones como el VIH, el envejecimiento de la población, la situación de los niños además de otros asuntos de género basadas violencia de género".
Las recomendaciones del estudio Fischer
Según el autor el estudio, el Parlamento Europeo debe realizar un estudio amplio y a nivel internacional sobre la situación de los derechos humanos tras un desastre natural. Para ello, y según este estudio, se deben ampliar las obligaciones de los Estados miembros y de las organizaciones que pueden proporcionar ayuda al lugar afectado.
Del mismo modo, este documento dice que la Unión Europea debe velar por el respeto de los derechos en las operaciones de ayuda humanitaria.
FOTO: Centro de tratamiento de cólera de Martissant, Puerto Príncipe, Haití. Abril 2012 © Mathieu Fortoul/MSF