Madrid.-La ministra de Fomento, Ana Pastor, ha destacado hoy, durante la inauguración del Encuentro Empresarial de Infraestructuras, la necesidad de fomentar nuevas oportunidades de financiación y de gestión en los sistemas de infraestructuras y transporte en Iberoamérica. Así, se ha referido a las alianzas público- privadas, un modelo que basa su éxito en el ‘reparto de responsabilidades y riesgos’ y en el que ha de existir un equilibrio entre el sector público y el privado en las distintas fases de gestión de una infraestructura.
En este proceso, ha precisado la ministra, la labor de la administración es generar la confianza suficiente en los inversores para que estos apuesten por financiar los sistemas de transporte, pese a las condiciones cambiantes que pudieran darse en algunos momentos.
Para ello, ha explicado Pastor, es necesario crear un marco legal que permita obtener la solución más óptima para ambas partes, donde se defiendan sus legítimos derechos y se garantice el cumplimiento de los acuerdos alcanzados.
En su intervención, la ministra ha indicado que una financiación a largo plazo y en la moneda local ‘sería una buena opción para financiar una infraestructuras de transporte’.
Así, ha explicado, el plazo de amortización de la financiación a largo plazo es similar al ciclo de la vida de la infraestructura, lo que reduce los riesgos de liquidez de la misma y contribuye a la viabilidad financiera del proyecto.
En este punto, la ministra ha destacado el papel de los fondos de pensiones como fuentes de financiación de infraestructuras a largo plazo y en moneda local.
En su discurso, Pastor ha abogado por abrir una nueva etapa en la colaboración público- privada ligada a las reformas estructurales de cada país y en el ámbito internacional, a través de los marcos de colaboración existentes, en los que el sector empresarial se sitúa en la primera línea como gran dinamizador de las economías.
Planificación y evaluación de los proyectos
Durante su intervención, la titular de Fomento ha destacado además la necesidad de realizar una correcta planificación y evaluación de los proyectos de infraestructuras del transporte, y de acompasar la ejecución de los proyectos a las disponibilidades financieras y presupuestarias.
En este sentido, ha abogado por encontrar las vías más adecuadas para sacar el máximo partido de las oportunidades que ofrecen las infraestructuras en España y en el resto de la Comunidad Iberoamericana.
‘España puede aportar la experiencia y la profesionalidad de nuestras empresas, que nos ha permitido, durante las dos últimas décadas, desarrollar una completa red de infraestructuras del transporte. Esta política nos ha llevado a ser el país con más kilómetros de alta velocidad en Europa y los segundos a nivel mundial, y a contar con infraestructuras de alta calidad, que ahora debemos conservar, mantener y mejorar’, ha indicado la ministra.