Agentes de la Policía Nacional y de la City of London Police han desmantelado un entramado mercantil asentado en Mallorca que presuntamente estafó más de 57 millones de euros a centenares de víctimas, en su mayoría ciudadanos británicos. Mediante agresivas campañas telefónicas ofrecían productos que prometían jugosas rentabilidades, pero que en realidad eran ficticios. Los perjudicados ingresaron su dinero en cuentas bancarias abiertas en España con identidades falsas, desde las que los fondos eran transferidos al extranjero o retirados en efectivo. Han sido detenidas 17 personas, bloqueadas cuentas en 11 entidades bancarias y registradas 5 viviendas y la oficina principal o boiler room, ubicada en Palma de Mallorca.
Año y medio de investigaciones han puesto al descubierto las actividades de una organización delictiva cuya actividad se enmarca dentro de los fraudes financieros. La organización seguía un esquema de boiler rooms, es decir, un entramado complejo de sociedades (sin actividad mercantil real) y personas físicas (muchos de ellos con identidades falsas), cuya única actividad se limita a la captación de ahorro privado bajo la oferta de atractivos productos de inversión que en realidad son ficticios.
El presunto “chiringuito financiero”, se encontraba asentado en Palma de Mallorca y estaba formado por personas de nacionalidad británica. Mediante este sistema consiguieron más de 50 millones de libras esterlinas (unos 57.000.000 de euros) de centenares de víctimas, en su mayoría también de nacionalidad británica.
Incautado un móvil de 200.000 euros
Los agentes descubrieron la ubicación exacta de la oficina principal desde la que operaba la organización, así como identificaron a varias personas relacionadas con la misma. Varios agentes de la City of London Police se desplazaron hasta España para colaborar en el operativo final, que ha culminado con la detención de 15 personas en Palma de Mallorca y 2 más en Santa Ponça (Calviá). Además, se han bloqueado preventivamente cuentas bancarias en 11 entidades y practicado registros en 3 domicilios particulares de Santa Ponça, 1 en Andratx y otro más en Palma de Mallorca, donde también se ha registrado una oficina.
Los investigadores se han incautado de cientos de listados de posibles víctimas, manuales de captación de clientes, documentación bancaria, 23 ordenadores portátiles y 18 teléfonos móviles. Uno de estos teléfonos móviles intervenido podría estar valorado en 200.000 euros.
Agentes de la UDEF Central de la Comisaría General de Policía Judicial y de la UDYCO de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Mallorca han desarrollado las investigaciones junto a la City of London Police inglesa.