Oviedo.-«Doy un paso atrás y sacrifico la política partidista al interés general de Asturias». Mercedes Fernández, la presidenta regional y portavoz parlamentaria del PP, comprometió ayer una oposición «sin complejos ni entreguismos», pero con la mano tendida al Gobierno de Javier Fernández porque «el momento es muy difícil». Mercedes Fernández se esforzó en ofrecer su mejor disposición al diálogo y la interlocución entre el Principado y el Gobierno central, toda una declaración de intenciones después de que el candidato a la Presidencia asturiana, Javier Fernández, le pidiera de forma clara y rotunda ayuda ante el Ejecutivo de Mariano Rajoy en cuestiones claves para la región.
El compromiso de Mercedes Fernández pasará la prueba del algodón más pronto que tarde. Javier Fernández pidió ayer a la dirigente popular que «suavice» la negativa de Cristóbal Montoro a ampliar el plazo de dos semanas para presentar un nuevo plan sobre el equilibrio de las cuentas regionales, tras el suspenso al propuesto por el Gobierno en funciones de Cascos. El ya presidente electo del Principado también reclamó la mediación de Mercedes Fernández en otras dos cuestiones capitales para Asturias: la rebaja de la tarifa industrial eléctrica y el futuro de la minería.
Mercedes Fernández planteó a Javier Fernández las dudas que le merecen la compañía de dos socios, IU y UPyD, con posiciones antagonistas sobre el futuro de la minería. «Debe clarificar este debate. Dice que se opondrá serena y enérgicamente. Me gusta esa combinación. Pero tiene dos socios que dicen justamente lo contrario, cómo va a conciliar dos posiciones tan diferentes», planteó la portavoz del PP, que censuró la posición negativa al mantenimiento de las ayudas del carbón del comisario europeo Joaquín Almunia, a quien calificó como «el ariete para cerrar la minería, ante el que callaron los socialistas».
«No me vincule usted al señor Almunia, yo puedo discrepar de lo que haya hecho en el marco de la Unión Europea. De los fondos mineros y las becas podemos entender que se ralenticen, pero la ayuda al funcionamiento de la minería es algo muy distinto porque supone el cierre de muchas explotaciones en Asturias», advirtió Javier Fernández, quien añadió que supondrá «el colapso de la minería privada en todo el occidente de Asturias». En un «guiño» a la portavoz popular, el presidente electo incluso se permitió una ironía en uno de los debates más acalorados de la sesión: «Si usted, con su indudable influencia ante Rajoy, se vuelca en el mantenimiento de esas ayudas al funcionamiento, igual admito lo de Almunia», bromeó. Antes, Mercedes Fernández había sacado fotos de Javier Fernández en la fiesta minera de Rodiezmo, «cuando cantaban y celebraban pero no le decían nada a Zapatero del futuro de la minería»