Veraneantes, mejor espectáculo de teatro en la última edición de los premios Max, podrá verse el sábado 19 de mayo a las 20:30 horas en el Jovellanos.
La coproducción del Teatro de la Abadía y Kamikaze producciones, en cuyo reparto figuran dos actores asturianos, obtuvo otros cuatro galardones Max.
Gijón.-Mejor espectáculo de teatro, mejor adaptación de obra teatral para Miguel del Arco, mejor composición musical para espectáculo escénico para Arnau Vilá, mejor actriz protagonista para Bárbara Lennie y mejor empresario o productor privado de artes escénicas para Kamikaze producciones, es la carta de presentación con la que Veraneantes llega a Gijón. El Jovellanos también ha sido testigo de la puesta en escena de la otra gran triunfadora en esta edición de los Max, La avería, que obtuvo cinco galardones, entre los que destacan mejor dirección para Blanca Portillo y mejor actor para Asier Etxeandía.
Miguel del Arco dirige la versión que él mismo ha adaptado del texto que Maxim Gorki escribió en 1904: “He escrito Veraneantes a partir del texto de Gorki. Ni siquiera pretende ser una versión libre. Me he permitido utilizar el original como punto de partida y desde ahí, investigar, probar, jugar…” Ese proceso de investigación y de juego más que eficaz para levantar proyectos teatrales que se convierten en éxitos, sigue la línea de trabajo ya trazada con Seis personajes en busca de autor, que arrasó en la anterior edición de los premios Max. La intención de la dirección es “pegar al público a los personajes como si fueran extensiones de ellos mismos, con la fascinación puesta en tratar de que la forma pertenezca a nuestra época más allá de la vestimenta de los personajes”. En esta ocasión el director ha contado con dos actores asturianos, Lidia Otón y Ernesto Arias. Ambos figuraban entre los nominados a mejor actriz y actor de reparto por sus papeles en Veraneantes.
Gorki escribió Veraneantes fijando su mirada en un grupo humano que se dispone a “disfrutar” del veraneo. Es esta la historia de un enfrentamiento al cambio, en la que el autor ruso nos muestra la capacidad humana de construir en otra dirección, de cambiar el rumbo, aunque a veces no sepamos exactamente hacia dónde nos dirigimos.
Esta versión tiene su punto de partida en el texto de Gorki, pero se sitúa en un lugar indeterminado fuera de la Rusia de principios del siglo XX. Un lugar que bien podría ser nuestro país, o cualquier otro, por gentileza de la globalización. Un estado que no vive al borde de la revolución, pero cuyos habitantes viven con la misma insatisfacción y necesidad de cambio.
“Del Arco ha inyectado sangre nueva a una obra discursiva, repetitiva, que ahora llega en una versión extraordinaria, libérrima y riquísima de matices, con nervio, con fulgurante veracidad en tono y diálogos, sin la menor retórica. (…) Quisiera dedicarle más espacio a cada intérprete porque todos están superlativos, pero se me acaba la página”. Marcos Ordóñez, Babelia, El País.
Intérpretes:
Ernesto Arias, Israel Elejalde, Miquel Fernández, Elisabet Gelabert, Bárbara Lennie, Miriam Montilla, Chema Muñoz, Lidia Otón, Manuela Paso, Raúl Prieto, Cristóbal Suárez.
Miguel del Arco Director
Arnau Vilá. Maestro musical
Juanjo Llorens. Diseño iluminación
Sandra Vicente. Diseño sonido
Eduardo Moreno. Escenografía
Ana López. Diseño vestuario
Carlota Ferrer. Movimiento escénico
Duración: 150’
