José Pichel Andrés/DICYT El desmán ibérico (Galemys pyrenaicus) es una especie única y emblemática, pero se ha extinguido o se encuentra en una situación extremadamente crítica en la provincia de Salamanca, según las conclusiones de los estudios realizados entre 2006 y 2010 por parte de investigadores del Departamento de Biología Animal de la Universidad de Salamanca y que se han materializado ahora en la publicación de un trabajo de grado presentado por Pablo García que recoge las principales conclusiones del equipo, liderado por el profesor de Zoología Miguel Lizana e integrado también por Valentín Arévalo e Isabel Mateos.
El desmán ibérico es un micromamífero emparentado con los topos, pero con unas peculiares características evolutivas, biológicas, morfológicas y ecológicas que posiblemente le hacen una especie más vulnerable, ya que sobrevive a base de insectos en ríos y arroyos poco alterados. En concreto, “se alimenta de larvas y ninfas de tricópteros, plecópteros y efemerópteros”, indica Pablo García en declaraciones a DiCYT, y su anatomía está muy adaptada a esta ingesta.
Este animal es una especie endémica de la Península Ibérica, con presencia en Pirineos, Sistema Ibérico, Sistema Central, Cordillera Cantábrica y Galicia, pero los muestreos de la última década han hecho saltar las alarmas, puesto que ha desaparecido de muchos lugares sin que la razón esté clara.
Metodología
En el Sistema Central, los últimos datos habían sido recopilados por la Universidad de Salamanca a finales del siglo XX en Ávila, Salamanca y Segovia. Sin embargo, búsquedas más recientes no hallaron el animal, salvo en la vecina provincia de Cáceres en 2004. Por eso, los científicos diseñaron un nuevo plan de muestreo para estudiar la situación en Salamanca con una metodología basada en trampeos nocturnos con nasas semisumergidas en los ríos de montaña y búsqueda de excrementos. Tras encontrar indicios en los primeros años, la campaña de 2010 reveló la completa ausencia del desmán en cualquier punto de la provincia salmantina.
A medida que la investigación avanzaba, se fue ampliando al resto del Sistema Central de Castilla y León en búsqueda de las causas de la extinción de esta especie. “El visón americano parece la causa fundamental, porque cuando coloniza un tramo de río los desmanes desaparecen, probablemente porque son sus presas”, indica Pablo García.
Poco caudal
Además, otro factor importante parece ser el descenso del caudal de los ríos. Los análisis de las series temporales en los ríos de montaña de Salamanca muestran que en los últimos años en muchas ocasiones el caudal es inferior a los 12 metros cúbicos por segundo que se consideram necesarios para el desmán, sobre todo en verano, cuando los ríos abastecen una mayor población humana en localidades cercanas.
Por lo tanto, los investigadores consideran que sólo reducir la presencia de una especie introducida por el hombre como el visón americano, cuyas primeras granjas se ubicaron hace décadas en Segovia, y la restauración de los caudales de los ríos pueden hacer cambiar la situación. Sin embargo, “es muy difícil que el desmán pueda recolonizar una zona de forma natural”, apunta Pablo García, “el primer paso tiene que ser controlar las poblaciones de visón y recuperar los cauces, para que tal vez después se pueda pensar en la cría en cautividad”.
FOTO: Desmán ibérico. Foto: David Pérez-Wikipedia
Un muestreo exhaustivo en busca de incendios |
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Rastrear la presencia del desmán se basa en la búsqueda de indicios indirectos como excrementos y pelos y en la posibilidad de capturar al propio animal por medio de nasas en lugares de paso obligado de pequeños ríos de montaña. Esta última tarea no es nada fácil, pues conviene hacerla por la noche, pero tampoco lo es la primera, puesto que encontrar restos orgánicos requiere un exhaustivo muestreo.
Los investigadores eligieron 40 tramos de ríos del sur de Salamanca que visitaron tres veces al año desde 2006 a 2010, lo que suma 480 visitas a cada tramo. Los excrementos pueden confundirse con los de animales similares, así que después de ser recogidos, requieren un análisis posterior en el laboratorio.
En 2007 y 2008 se confirmó la presencia del desmán en las cabeceras de los ríos Cuerpo de Hombre y Francia. En 2009 se redujo su presencia a pequeños tramos, aunque la abundancia oscilaba entre 0’6 y 0’8 desmanes por kilómetro de río, dentro de los valores normales en otras zonas. Sin embargo, en los muestreos de 2010 la especie ya no fue detectada en la provincia de Salamanca. |