Sevilla.-El candidato a la Presidencia de la Junta y presidente en funciones, José Antonio Griñán, ha rechazado en su discurso de investidura la dureza de los ajustes que se están llevando a cabo, hasta el punto, ha denunciado, de que se "subordina el empleo al objetivo de déficit" y ha apostado, en cambio, por la soberanía "de la política frente a los mercados" con el objetivo de favorecer el crecimiento.
Según Griñán, en la actual política de ajuste fiscal se están cometiendo errores, como son "subordinar el empleo al objetivo de déficit", "fijar unos plazos excesivamente cortos para la consolidación fiscal"; distribuir el déficit entre las distintas administraciones "sin atender las competencias de cada una de ellas" y, sobre todo, "olvidar que el principal problema del endeudamiento" no se encuentra en el sector público, que representa un 20% del total, sino en el privado.
En cambio, ha recalcado que los responsables públicos deben "exigir la soberanía de la política sobre los mercados" para cumplir con la "misión" que los gobiernos tienen asignada "por encima de todas", que es "favorecer el crecimiento del empleo".
"Los mercados nos atacan por el lado del déficit pero nuestro problema es el paro y la falta de financiación de la economía. Y ni uno ni otro problema se están afrontando con medidas capaces de solucionarlos", ha recordado.
Griñán ha advertido que "un ajuste presupuestario tan intenso y en tan poco tiempo como el que va a sufrir España va a contribuir de manera significativa a deprimir aún más el crecimiento de la economía española y a acentuar la crisis", y "lo que es peor, afectando a nuestro modelo de protección social".
El candidato ha rechazado que "una crisis de las finanzas públicas pueda erigirse en el argumento de dilapidar años y años de avances sociales", así como que se pueda considerar "insostenible un modelo de Estado, el de las autonomías, que, con sus altibajos, ha sido el que mejor ha servido para un crecimiento equilibrado de España".
"Por encima de todo, no podemos tolerar retroceder en la igualdad de oportunidades", cuya mejor expresión se encuentra, ha señalado Griñán, en la educación y sanidad públicas y en la atención a la dependencia.
Por ello, el candidato a la Presidencia de la Junta ha defendido el "principio de estabilidad" frente al "déficit cero" y ha advertido de que, si bien Andalucía va a cumplir los compromisos de reducción del déficit con los que se ha comprometido, "ello no me impide repetir que la forma en que estamos afrontando este problema es un error".
"No solo austeridad"
La "austeridad" es conveniente, pero "no solo austeridad", ha matizado el candidato, quien ha recordado que "equilibrar las cuentas públicas es un buen objetivo si con ello no deprimimos la economía y aumentamos el desempleo". Una "política de recortes indiscriminada" dejará "un país descapitalizado e incapaz de salir del atolladero", ha pronosticado.
José Antonio Griñán ha rechazado que se esté actuando solamente sobre el gasto cuando "el 80% del déficit es consecuencia de la caída de ingresos", lo que obliga a intervenir en este sentido, no solo con políticas fiscales sino con medidas de estímulo y con la evaluación del impacto de los recortes sobre la propia actividad económica.
"¿No somos acaso conscientes de que prescindir de profesores, investigadores, energías renovables, limitar la igualdad de oportunidades en la educación o empobrecer nuestro sistema sanitario no es una política de austeridad sino un derroche, un despilfarro, que no nos podemos permitir?", ha enfatizado.
Mientras que en el ámbito europeo se están dando "pasos atrás", con una Alemania "cuyas reglas y conveniencia se han hecho leyes para todos", en detrimento de "los países mediterráneos que compartimos el euro", en España la reforma laboral se ha convertido en instrumento para "reducir plantillas a bajo coste", el sector financiero sigue "sin salir de sus problemas y sin regar la economía con el crédito" y los Presupuestos Generales del Estado "además de incumplir nuestro Estatuto, no han sido capaces de traer la calma a los mercados".
Griñán ha subrayado que la política económica "parece haberse convertido en contabilidad", en mera "reducción del gasto público" y ha insistido en que "para romper ese círculo vicioso, es imprescindible combinar una política de estabilidad con una política de reactivación económica".
El estado de las cuentas andaluzas
En cuanto al estado de las cuentas andaluzas, el presidente en funciones ha rechazado las declaraciones "falsas y temerarias" que se han venido produciendo al respecto en los últimos tiempos.
Aunque el Gobierno andaluz saliente ha sido "prudente" en sus respuestas para no iniciar una "espiral de confrontación" que pudiera poner en riesgo la "estabilidad financiera", José Antonio Griñán ha querido poner de manifiesto que Andalucía ahorró en tiempos de superávit hasta situar su deuda un 26% más baja que el resto de comunidades; así como que el endeudamiento hoy sigue siendo un tercio inferior al del resto de autonomías, que la deuda por habitante andaluza es la mitad de la media y que el déficit de 2011 se situó en torno a la media.
El presidente en funciones ha remarcado además que "en Andalucía todas las facturas a proveedores están contabilizadas y remitidas al Ministerio de Hacienda, y todas están por debajo de la media del débito por habitante del resto de las comunidades autónomas".