Las cuentas de la Seguridad Social para 2012 garantizan el poder adquisitivo de las pensiones sin renunciar al equilibrio presupuestario. Para este año, el Presupuesto asume el compromiso de revalorizar todas las pensiones conforme al Pacto de Toledo: las mínimas lo harán un 2,9% y el resto un 1%. En 2011, fruto de la congelación aplicada, se produjo la pérdida más alta de poder adquisitivo que afectó a la mayoría de las pagas, que no fueron compensadas por la desviación del IPC del 1,9%
El Presupuesto destina más recursos a la Seguridad Social cuando más lo necesita. Para ello, se han recortado todos los capítulos de gasto -con un esfuerzo de austeridad notable en personal (-0,84%), bienes y servicios (-10,2%), gastos financieros (-11,3%), inversiones reales (-33,7%) o inversiones de capital (-58,7%)-, salvaguardando el objetivo fundamental del Sistema, que es el pago creciente de las pensiones contributivas, a las que se dedican un 2,83% de recursos más.
Además, el Estado realiza una aportación histórica de 1.000 millones más que en 2011 para financiar los complementos a mínimos (cantidad que se abona para que todas las pensiones lleguen al mínimo establecido para cada ejercicio). La participación total por este concepto alcanzará los 3.806,3 millones de euros, un claro avance en la separación de las fuentes de financiación de la Seguridad Social, acordada en el Pacto de Toledo. Así, el Estado asume el 49,58% del total presupuestado para complementar las pensiones mínimas y las cotizaciones sociales sufragan el 50,42% restante.
Más protección y austeridad
En un momento económico de dificultad, la Seguridad Social incrementa el gasto en pensiones contributivas un 2,89%. Del total del Presupuesto del Sistema -que este año alcanza 120.690,9 millones de euros- 8,6 de cada diez euros son para pensiones. Las prestaciones económicas absorben el 95,2% del gasto total, con un aumento de 1,34% respecto a 2011. El gasto total en pensiones para este año se sitúa en el 9,5% del Producto Interior Bruto (PIB), frente al 9,2% que alcanzó el pasado año.
El gasto por Incapacidad Temporal se reduce respecto al anterior ejercicio en una cuantía estimada en 500 millones de euros, lo que supone algo más del 8%. Esta disminución es consecuencia del menor número de cotizantes y de la contención del gasto en la prestación, derivada del mayor control de los procesos y de su duración media.
Ingresos
La crisis provoca para 2012 una previsión de descenso del total de ingresos por operaciones no financieras de 3.518,8 millones de euros respecto al año anterior, un 2,85% menos. En total, el presupuesto consolidado de ingresos no financieros quedará en 119.884,1 millones, un 2,9% menos que el pasado ejercicios.
Las cotizaciones sociales, que constituyen la principal fuente de financiación del Sistema, caen en 4.126 millones de euros (-3,73%). Este epígrafe se desglosa en tres apartados: en primer lugar, las cotizaciones de empresas y trabajadores, que bajan un 3,89% por el menor número de cotizantes; seguidas de los ingresos por cotizaciones del Servicio Público de Empleo Estatal (SPEE), que se reducen un 2,24% por la caída de cotizaciones de desempleados (-4,62%) y de las transferencias procedentes del SPEE para compensar las bonificaciones en la cotización, incrementadas en la Reforma Laboral; y, finalmente, los ingresos procedentes de las mutuas en relación con el cese de actividad de los trabajadores autónomos que aumentan un 97,57%, pero tienen una escasa importancia relativa en el monto total.
En definitiva, los Presupuestos atienden a lo fundamental: resguardan a las pensiones de la crisis y suponen un avance decisivo en el proceso de consolidación presupuestaria
