Uno de los tres detenidos portaba documentación falsa mejicana lo cual despertó las alarmas de la policía aduanera
El destino de la droga eran las costas gallegas donde un grupo de narcotransportistas se encargaría de recogerla
La actuación conjunta de las policías española, búlgara y francesa ha evitado la entrada en España de un cargamento de 500 kilos de cocaína. El velero con la droga fue interceptado en la isla caribeña de Guadalupe antes de partir hacia las costas gallegas. Uno de los tres detenidos en relación con el envío había entrado en el país con documentación falsa mejicana, lo que despertó las sospechas de la policía en la Isla de Trinidad. Además, la embarcación ya había sido relacionada con anterioridad por los agentes extranjeros con el transporte de sustancias estupefacientes.
La investigación se inició a raíz de la información procedente de la Policía Judicial de Francia y de Bulgaria. A través de los mecanismos de coordinación y cooperación policial internacional se relacionaron estos datos con una actuación contra el tráfico de drogas desarrollada en nuestro país por la Policía Nacional sobre un grupo de narcotransportistas gallegos.
Las comprobaciones realizadas confirmaron que el velero, con pabellón de San Vicente y las Granadinas, había recalado en el puerto deportivo de Pointe a Pitre unas semanas antes de ser interceptado, desde donde había partido hacia Trinidad. Esta isla del Caribe ha sido tradicionalmente punto de partida de los veleros que acuden a recibir los alijos de cocaína a la desembocadura del río Orinoco.
Además, el velero, de más de 12 metros de eslora y utilizado en competiciones deportivas, había estado inscrito en el año 2010 en una regata que se desarrolla entre St. Malo, Francia y la Isla de Guadalupe. En ese momento, las autoridades policiales búlgaras, país de procedencia de los tripulantes, alertaron a la agencia antidroga francesa porque sospechaban que podría tratarse de un pretexto para transportar hasta Europa una cantidad desconocida de droga.
Lancheros gallegos trasladarían la cocaína a su llegada a España
La investigación seguida en España permitió acreditar que el velero una vez cargado con la cocaína se dirigiría hacia nuestro país y que, una vez frente a las costas gallegas, unos lancheros recogerían la droga que luego entregarían al grupo propietario de la ilícita mercancía para su distribución.
Gracias a la cooperación internacional y la coordinación con las Aduanas Francesas y la agencia antidroga de Francia (OCTRIS), apoyada por la Oficina de la DEA (Drugs Enforcements Administration) en Madrid, se averiguó la localización y la fecha en la que había atracado el velero en la marina de "Pointe a Pietre", en la Isla de Guadalupe, con droga en su interior .
En el registro realizado en la embarcación fueron intervenidos catorce fardos de cocaína que arrojaron un peso bruto aproximado de 500 kilogramos de cocaína. Sus tres tripulantes fueron detenidos.
En la investigación han participado agentes del GRECO de Galicia y de la Brigada Central de Estupefacientes, pertenecientes a la UDYCO Central de la Comisaría General de Policía Judicial, de las policías de Francia y Bulgaria y de la Oficina de la DEA norteamericana en Madrid.