El representante especial de la ONU para Somalia expresó gran indignación por el ataque suicida perpetrado hoy en Mogadishu contra el Teatro Nacional y llamó una vez más al grupo islamista Al-Shabaab, que reivindicó el asalto, a poner fin a estos actos de violencia. El atentado se produjo durante la ceremonia de reinauguración de ese recinto y dejó al menos diez muertos y un número indeterminado de heridos. Entre los fallecidos se contaron los presidentes del Comité Olímpico y de la Federación de Futbol somalíes. El primer ministro y tres miembros de su gabinete resultaron ilesos.

Augustine Mahiga señaló que la reapertura del Teatro Nacional es un símbolo del cambio real que tiene lugar en Somalia y que incluye la reconstrucción de la capital y la búsqueda de restaurar las actividades culturales.

El enviado indicó que este tipo de acciones causa gran sufrimiento a la población civil y muestra un total desprecio por la vida humana.

Mahiga conminó a los líderes y al pueblo somalíes a reafirmar su determinación de no abandonar el camino de la paz y la reconciliación.

“No debemos permitir que este trágico evento descarrile los avances logrados en Somalia”, apuntó.

Recordó que el país adoptará una nueva constitución en mayo y que en agosto habrá un nuevo gobierno.

“El futuro de Somalia no puede ser rehén de una minoría violenta que recurre a actos terroristas contra sus compatriotas”, enfatizó Mahiga

fFOTO: © ACNUR/S.Modola. Civiles en un asentamiento para personas desplazadas internas junto a las ruinas de la catedral de Mogadiscio, en agosto. Éste fue el último mes en que la ciudad fue atacada con proyectiles.