En España7 millones de niños y niñas viajan a diario en el transporte escolar sin suficientes medidas de seguridad
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A diario, millones de niños y niñas cogen el autobús para ir al colegio. Y todos los días corren grave riesgo por no emplear sistemas de seguridad específicos que les protejan en caso de accidente. Si en un coche particular tiene que llevar sistemas especiales ¿por qué no en un autobús?
Hace pocos días sufríamos con la noticia de un accidente escolar con víctimas en Almería. En las imágenes de tan fatal desenlace se ha podido apreciar como las butacas de autobús estaban intactas: la víctima mortal y los heridos graves se han producido por no llevar la seguridad adecuada o no haberse puesto los cinturones. Justa al día siguiente de esta noticia ocurrió algo parecido en Bergara (Bizkaia), otro autobús escolar accidentado con heridos graves. Los accidentes muchas veces son inevitables, pero los daños que se produce sí pueden disminuirse
Todos conocemos ya los enormes riesgos que existen en carretera por el hecho de no emplear sistemas de seguridad específicos para los menores. De hecho existen fuertes sanciones por viajar en coche con niños y niñas sin su debida seguridad. Sin embargo, en los autobuses, los mismos menores, por las mismas carreteras, a las mismas velocidades y con los mismos riesgos viajan a diario sin ninguna seguridad o con cinturones ideados para adultos que en ocasiones son incluso más peligrosos.
Un leve frenazo a 20 km/h hace que el pequeño salga irremediablemente despedido contra la butaca de enfrente. A la altura de un menor, impacta de lleno sobre zonas rígidas y duras, como la mesilla, un asa, o incluso un cenicero que aún muchos autobuses llevan, y produce lesiones muchas veces irreparables: mandíbulas desencajadas, graves daños en la cabeza, hombros, caderas, brazos... Accidentes que nunca aparecen en las estadísticas, ya que sólo se habla de datos de mortalidad.
Al igual que en el año 2005 la Dirección General de Tráfico obligó al uso de Sistemas de Retención Infantil en el vehículo particular, debería ahora hacer lo mismo en los autobuses. Somos muchos los padres y madres que estaríamos más tranquilos, y podrían salvarse muchas vidas y evitarse muchos daños.
Se necesitan muchas voces para que la DGT regule sobre los sistemas de seguridad infantil en los autobuses, y sobre todo en los autobuses de transporte escolar. Firma y difunde la petición para que la DGT garantice una mejor seguridad para nuestros hijos.
Para obtener mayor información, http://www.iberdidac.org/news/segurbaby/segurbaby26032012.html
Hace pocos días sufríamos con la noticia de un accidente escolar con víctimas en Almería. En las imágenes de tan fatal desenlace se ha podido apreciar como las butacas de autobús estaban intactas: la víctima mortal y los heridos graves se han producido por no llevar la seguridad adecuada o no haberse puesto los cinturones. Justa al día siguiente de esta noticia ocurrió algo parecido en Bergara (Bizkaia), otro autobús escolar accidentado con heridos graves. Los accidentes muchas veces son inevitables, pero los daños que se produce sí pueden disminuirse
Todos conocemos ya los enormes riesgos que existen en carretera por el hecho de no emplear sistemas de seguridad específicos para los menores. De hecho existen fuertes sanciones por viajar en coche con niños y niñas sin su debida seguridad. Sin embargo, en los autobuses, los mismos menores, por las mismas carreteras, a las mismas velocidades y con los mismos riesgos viajan a diario sin ninguna seguridad o con cinturones ideados para adultos que en ocasiones son incluso más peligrosos.
Un leve frenazo a 20 km/h hace que el pequeño salga irremediablemente despedido contra la butaca de enfrente. A la altura de un menor, impacta de lleno sobre zonas rígidas y duras, como la mesilla, un asa, o incluso un cenicero que aún muchos autobuses llevan, y produce lesiones muchas veces irreparables: mandíbulas desencajadas, graves daños en la cabeza, hombros, caderas, brazos... Accidentes que nunca aparecen en las estadísticas, ya que sólo se habla de datos de mortalidad.
Al igual que en el año 2005 la Dirección General de Tráfico obligó al uso de Sistemas de Retención Infantil en el vehículo particular, debería ahora hacer lo mismo en los autobuses. Somos muchos los padres y madres que estaríamos más tranquilos, y podrían salvarse muchas vidas y evitarse muchos daños.
Se necesitan muchas voces para que la DGT regule sobre los sistemas de seguridad infantil en los autobuses, y sobre todo en los autobuses de transporte escolar. Firma y difunde la petición para que la DGT garantice una mejor seguridad para nuestros hijos.
Para obtener mayor información, http://www.iberdidac.org/news/segurbaby/segurbaby26032012.html