Monteagudo, (Prensa Palacio)- Durante el acto de homenaje al héroe guaraní, Apiaguayki Tumpa, quien fue asesinado hace 120 años, el presidente Evo Morales reflexionó sobre el ejemplo de valor del líder indígena que luchó por liberar a su pueblo y afirmó que “el nuevo colonialismo es el ambientalismo a la cabeza de los países capitalistas”.
“Una cosa es defender los derechos de la madre tierra otra cosa es, so pretexto del medioambiente, crear instituciones y convertir a los pueblos en colonias y aquí revisando este hecho histórico llego a la conclusión de que el estado colonial ha destrozado al hermano indígena guaraní y estamos en proceso de liberación”, dijo el Mandatario en la plaza de Monteagudo, donde el 29 de marzo de 1892 era ejecutado Apaiaguayki Tumpa ante la mirada de sus hermanos guaraníes.
Tras narrar la vida y la lucha del líder indígena, Morales afirmó que un justo homenaje a los mártires por la liberación de los indígenas y campesinos es levantar el puño en alto como símbolo de rebelión y de revolución.
“He aprendido del campesino indígena que como justo homenaje a nuestros antepasados es levantar el puño en alto como homenaje a la rebelión. De la rebelión a la revolución y estamos en la etapa de descolonización que cuesta todavía”.
El ejemplo que deja Apiaguayki Tumpa, según el Mandatario, debe dar a entender que ser autoridad no es aprovecharse, “es servir al pueblo” y lo que hizo el líder guaraní fue mucho más porque dio su vida por su pueblo. Por eso sugirió que la avenida que desde hoy tiene pavimento rígido, entregado por el Jefe de Estado, lleve el nombre del prócer.
“La APG recuerda este hecho histórico, los aymaras tienen su Tupak Katari, Julián Apaza; las mujeres su Bartolina Sisa; los criollos su líder Alejo Calatayud que se reveló en Cochabamba, líderes reconocidos, pero nunca recordamos a Apiaguayki Tumpa, por eso el Presidente va a rendir homenaje al pueblo guaraní por sus luchas, rebeliones contra el dominio”, señaló Morales.
Cuando advino la República de criollos y mestizos aspirantes a títulos nobiliarios se reciclaron las matanzas. En 1891 apareció Tumpa que organizó un ejército de 6 mil jóvenes. El 28 de enero de 1892 enfrentó a las fuerzas republicanas en Kuruyuki.
Después de 12 horas de combate quedaron cientos de cadáveres indígenas en la planicie, luego vino la persecución selvática, la quema de viviendas y la matanza a garrotazos de heridos y sobrevivientes.
Apaguaiki Tumpa traicionado fue capturado, sentenciado a muerte en la plaza de Sauces, hoy Monteagudo y murió trágicamente a las 3 de la tarde del 29 de marzo de 1892 para regocijo de los republicanos racistas.