"El Parlamento Europeo no aceptará menos fondos para el presupuesto de la UE", remarcó el Presidente Schulz durante la apertura este jueves de la conferencia de alto nivel sobre el marco financiero plurianual para el periodo 2014-2020. Schulz explicó que para invertir en crecimiento en tiempos de austeridad, la Unión Europea necesita contar con un presupuesto adecuado a ese fin, que además debe proceder en su totalidad de recursos propios para evitar complicadas negociaciones entre los países.
Actualmente, tres cuartas partes del presupuesto de la Unión Europea proceden de aportaciones de los Estados miembros calculadas sobre la base de su producto nacional bruto (PNB). Esto lleva a que las negociaciones presupuestarias entre los países se centren en cuánto contribuye cada uno de ellos al presupuesto comunitario, y de qué forma revierte esta inversión en su territorio.
Para simplificar el sistema, la Comisión Europea propone que los recursos procedan del IVA y de una tasa a las transacciones financieras que reduciría la contribución de parte de los Estados miembros en función de su PNB, con lo que se facilitaría el acuerdo. El Parlamento Europeo se ha mostrado favorable, en principio, a ambas propuestas.
Conferencia
Durante una conferencia de alto nivel que tuvo lugar en el Parlamento Europeo el jueves 22 de marzo, eurodiputados debatieron estas medidas con parlamentarios nacionales. El Presidente de la Eurocámara, Martin Schulz, declaró durante la apertura de la cita que es imposible conjugar el cada vez mayor número de competencias y tareas atribuidas a la UE con recortes en los fondos necesarios para implementar las distintas políticas.
A su vez, la Primera Ministra danesa, Helle Thorning-Schmidt, que participó en la conferencia como representante de la presidencia rotatoria del Consejo que ahora ostenta su país, recordó que la oportunidad de revisar el marco presupuestario a largo plazo de la UE sólo se presenta cada siete años, por lo que resaltó la importancia de lograr reformarlo ahora.
El Presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durão Barroso, subrayó por su parte que el presupuesto de la Unión Europea no fija gastos, sino inversiones en las regiones y ciudades de la UE.
Reducir las contribuciones de los países
El comisario de Presupuestos Januz Lewandowski aseguró que la tasa a las transacciones financieras podría reducir las contribuciones de los Estados miembros hasta en un cincuenta por ciento para 2020, aportando 54.000 millones de euros a la UE. Según sus cálculos, dos tercios de los ingresos generados por la tasa irían a parar al presupuesto de la UE, y la otra tercera parte, a los nacionales.
Sin embargo, la presidenta de la comisión de Asuntos Europeos en el Parlamento danés, Eva Kjer Hansen, se mostró dubitativa acerca a del impacto de la tasa sobre el crecimiento y la competitividad, mientras que una de las ponentes sobre el marco financiero plurianual en el PE, la eurodiputada liberal danesa Anne E. Jensen, explicó que se trata de simplificar el sistema. Lo básico, declaró, sería el recorte de las contribuciones nacionales, así como centrarse en la calidad de las inversiones.
La europarlamentaria socialista francesa Pervenche Beres dijo apoyar la tasa, ya que grava un sector económico que hasta ahora se había mantenido al margen, pero Milan M. Cvikl, del Tribunal de Cuentas europeo, alertó de que los ingresos generados por la tasa serían muy volátiles, ya que el volumen de las transacciones financieras no es estable.